Espot es presidente de la entidad que ha promovido denuncias a comercios que no rotulan en catalán y que organizó su acción más sonada: la primera gran pitada al himno de España y al rey en la final de Copa de 2009 y en sucesivas finales entre el Barça y equipos vascos.
Espot, que se ha llegado a definir como “antiespañol”, se enfadó mucho porque no le atendieran en lengua catalana en el centro comercial. Así que decidió escribir un mensaje en Twitter mencionando a El Corte Inglés, para denunciar ante el departamento de Soluciones y servicios de telefonía de la séptima planta de los grandes almacenes la atención lingüística que había recibido.
El tuit surtió efecto. Según Espot, dos horas después de su primer mensaje, un directivo llamó para disculparse, asegurando que se habían tomado las medidas oportunas para que no se vuelva a dar una situación como esta.
Sin embargo, el incidente no ha quedado ahí, porque el político Juan Carlos Girauta, de Ciudadanos, ha pedido también explicaciones a través de Twitter a El Corte Inglés, preguntándoles si han "represaliado" a ese trabajador por no poder hablar en catalán con el político independentista.
M'acaba de trucar el cap de comunicació de Catalunya d @elcorteinglesa, Sr. Magrinyac, tot demanant disculpes en nom de l'empresa. Ha afegit que ja han pres les mesures oportunes perquè una situació com aquesta no es torni a repetir. Esperem que sigui tal com ell diu. https://t.co/0VJ3nVfDBa
— Santiago Espot (@santiagoespot) December 9, 2019
Parece que @elcorteingles tiene que responder a una pregunta y no acaba de hacerlo.
— Juan Carlos Girauta (@GirautaOficial) December 10, 2019
Es sencilla. Basta con “sí” o “no”:
¿Han represaliado a un empleado por indicarle a un cliente que no entendía el catalán ya que acababa de llegar a Barcelona?
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