El Salmantino venció por 2-0 al San Agustín de Guadalix en el último encuentro de la pretemporada para los de María Hernández. Los goleadores fueron Jorge, de penalti, y Juanan. Antes del encuentro, el club presentó uno a uno a los integrantes de la primera plantilla.
Tras la presentación de los jugadores, el presidente Carlos Martín se dirigió a sus aficionados con unas palabras. “Esta temporada vamos a luchar por el ascenso. La Unión nos dejó pero antes de irse dejó jugando al filial, a este mismo Salmantino que hoy está jugando en el Helmántico. Si la afición lo decide, la Unión volverá. Que recuperemos la Unión solo lo decide esta afición, todos los que hemos entendido que dejó compitiendo a su filial”, explicó el presidente Carlos Martín.
De inicio, María Hernández colocó un once que bien podría ser el del debut el próximo domingo ante el Almazán: Rodri, Tyson, Dela, Miguel Ángel, Tejedor, Juanan, Amaro, Jorge, Caramelo, Garban y Galván.
El partido no tuvo demasiado ritmo en la primera mitad. Y le costó que llegase la primera acción peligrosa. Al filo del cuarto de hora, Caramelo recorta en la derecha y centra a la frontal para Jorge, que envía la pelota alta.
Tres minutos después, el colegiado decretó penalti en una caída de Galván y Jorge mandó el balón a la red desde los once metros. Caramelo, a los veinte minutos, tuvo el 2-0 en sus botas pero se encontró con la parada del meta rival.
Los visitantes aparecieron en dos ocasiones sobre la meta de Rodri. En la primera, Acuña mandó la pelota fuera en un tiro desde dentro del área y, a cuatro para el descanso, Tejedor llegó rápido al corte en el área pequeña.
Tras el paso por los vestuarios, el Salmantino salió decidido a marcar el segundo. Caramelo avisó a los treinta segundos y Juanan, de cabeza, puso el gol a la salida de un córner. Al cuarto de hora, el colegiado anuló un gol de Garban por fuera de juego y Rodri evitó el 2-1 con un disparo de Lomas, que realizó un buen slalom entre la defensa charra.
Un doble parada del meta rival, a Garban y a Valentín, dejó con la miel en los labios a los delanteros locales. Pero el partido ya estaba completamente inclinado de parte del Salmantino, mucho más entero de piernas y cabeza.
Los últimos minutos sirvieron para ver el nivel del central Masnour, a prueba. El central se desenvolvió con autoridad e inteligencia para sacar el balón. También hubo tiempo para que el árbitro anulase un gol a los visitantes por fuera de juego.
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