De los 862 perros recogidos por Scooby entre enero y julio en Castilla y León tan sólo un 12% contaba con microchip identificativo. El incumplimiento de la normativa se daba más en las zonas rurales de Zamora y Palencia, donde solo el 4% y 6% de los perros, respectivamente, se encontraban identificados.
La Ley de protección de los animales de compañía de Castilla y León establece que todos los perros deben estar identificados y censados a partir de los 3 meses de edad. La ausencia de identificación entraña una falta grave.
Impunidad frente al abandono
En 2017, la protectora se está enfrentando a cifras de abandono altísimas, lo que nos está llevando a una situación muy difícil en nuestros refugios. Sin embargo, si la ley se cumpliese y todos los animales estuvieran identificados, estas cifras decrecerían considerablemente, obligando a las personas a responsabilizarse de sus propios animales y a controlar su reproducción.
Más controles en las zonas rurales
Las estadísticas de la protectora apuntan a que es en las zonas rurales donde más abandonos se producen y donde menos perros identificados hay. Por ello pedimos a las administraciones y a los cuerpos de seguridad del Estado que fomenten los controles de identificación en estas áreas combatiendo así este problema desde su raíz.
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