Desde 2013, la recuperación iniciada por el mercado de trabajo permitió una reducción general de la conflictividad laboral. Aunque con muchas diferencias entre autonomías, esa tendencia se ha quebrado en el período analizado. Sin embargo, Castilla y León exhibe una nueva caída de la conflictividad, que le ha permitido ganar tres posiciones, hasta la cuarta.
Extremadura ha pasado a liderar la clasificación, seguida por Castilla-La Mancha, relegando a Baleares al tercer lugar. La comunidad con mayor conflictividad continúa siendo el País Vasco, aunque ahora seguida de Asturias y Cantabria.
Número de huelgas
Desde mediados de 2013, cuando el número de huelgas en todo el país alcanzó un máximo de 21,4 conflictos en un trimestre por cada 100.000 empresas, esta variable comenzó a descender. El descenso se prolongó hasta comienzos de 2016, cuando se registró un mínimo de 11 huelgas por cada 100.000 empresas. Desde entonces se inició un paulatino ascenso que hizo que en los tres últimos trimestres se registraran incrementos interanuales en el número de huelgas, cosa que no sucedía desde 2013. En el segundo trimestre han tenido lugar 14,9 conflictos por cada 100.000 empresas, el mayor número desde marzo de 2015 y un 33,2% más que un año atrás.
En Castilla y León, tras alcanzar un máximo de 17,2 huelgas por cada 100.000 empresas a finales de 2014, esta variable comenzó a descender. Ese descenso continúa hasta ahora. En el trimestre que nos ocupa se han registrado 6,1 conflictos, tras una caída interanual del 45,6%. Es la menor proporción de huelgas para esta autonomía en al menos 17 años y la tercera más baja entre todas las autonomías.
Hay otros casos de regiones con fuertes descensos en la cantidad de huelgas, además de Castilla y León. En Extremadura, su número ha disminuido un 54,4%, para quedar en solo 5,5 conflictos por cada 100.000 compañías. Solo Castilla-La Mancha presenta una menor cantidad de huelgas, con 4,6 por cada 100.000 empresas, tras haber recortado su número un 51,4%.
El número de huelgas ha crecido en ocho autonomías. Los mayores incrementos interanuales se han registrado en Baleares (+103%, para llegar a loa 13,2 conflictos por cada 100.000 empresas) y la Comunidad de Madrid (+98,1%, por lo que suman 21,4). No obstante, la autonomía con mayor número de conflictos es el País Vasco, con 78,7 huelgas por cada 100.000 firmas, con un aumento interanual del 32,5%.
Participantes en huelgas
En el conjunto de España el número de trabajadores participantes en huelgas ha crecido un 10,5% interanual, hasta llegar a los 23,3 huelguistas por cada 10.000 ocupados. Al haber crecido menos el número de huelguistas que el de huelgas, se deduce que el seguimiento medio de cada conflicto se ha reducido.
El caso castellanoleonés es singular. Por un lado, ha logrado la mayor caída en la participación en huelgas, con un descenso interanual del 80,2%. Así, el número de huelguistas ha caído hasta apenas 2,3 por cada 10.000 ocupados, que es también el menor registro para esta región en al menos 17 años. Por otro lado, la reducción en la cantidad de participantes en huelgas ha sido tan intensa que ha pasado a ser la autonomía con menor proporción de huelguistas, cuando hace un año había nueve comunidades que exhibían mejores resultados que Castilla y León. Al haber sido la disminución en el número de participantes en huelgas más profunda que la de conflictos, se deriva que cada huelga tiene un seguimiento menor.
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