Con apenas el 38% de capacidad de los embalses en el conjunto de la Península, noviembre no se espera que sea la solución para ello. Al mes de septiembre, inusualmente seco, sin lluvias, se ha unido un octubre en el que las lluvias tampoco han estado todo lo presente que deberían y unas temperaturas anormalmente altas.
Así, con la vista puesta en el cielo, noviembre no parece que será muy diferente a estos últimos meses. La primera quincena, de hecho, se espera más seca de lo normal, especialmente en la mitad oeste, en la que se encuentra Salamanca. Esto a pesar de que sí se esperen lluvias en esta primera semana de mes cuando la Agencia Estatal de Meteorología da una gran probabilidad de lluvia desde el jueves al sábado.
Sin embargo, esta borrasca que llegará desde el Atlántico dará paso otra vez a la falta de lluvias y una temperatura superior a lo lógico en esta parte del año. Es probable, anuncian desde el portal Eltiempo.es, que el anticiclón que seguirá a la borrasca esté presente, al menos, la primera quincena, tras lo que la tendencia virará a la normalización.
Esta, en noviembre, suele tener temperaturas medias cercanas a los once grados, con heladas principalmente en zonas de montaña. Las precipitaciones medias se sitúan en unos 80 mm, aunque el año pasado las temperaturas fueron más frías de lo habitual y llovió un 33% más de lo normal, especialmente, eso sí, en la zona del Mediterráneo.
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