La temporada del Babilafuente en la Primera División del Salmantino Vegapiel está siendo muy buena. Se están mostrando como un conjunto altamente fiable. Marchan en mitad de tabla luchando por el quinto puesto, que tienen a solo dos puntos, después de haber sido sancionados por diversos motivos con once puntos menos esta temporada. En el caso de que esto no hubiera ocurrido, irían terceros, buena muestra del gran conjunto que han formado.
Y no es fácil ver algo así en equipos hechos en localidades lejanas a Salamanca. Los veinte que conforman la plantilla en Babilafuente, de hecho, son del municipio o de otros cercanos donde siempre hay menos gente entre la que elegir. Además, en los últimos años ha habido un aumento de los conjuntos de las localidades cercanas a Babilafuente por lo que incluso los de la zona se dividen entre varios.
Por eso no se le debe restar ni una pizca de mérito a la campaña que están realizando y que esperan volver a emular o superar en la temporada que viene. Para esta esperan contar con una plantilla un poco más extensa aunque no hayan contado con problemas de compromiso. De hecho, ya se ojea el mercado entre los más jóvenes del pueblo para que vayan cogiendo dinámica de un fútbol modesto cada vez más exigente.
El único pero, por el momento, lo tienen precisamente con llamarse Babilafuente y jugar en Villoruela. No comprenden desde el equipo por qué no se puede jugar en el campo de la localidad que, además, ha sido sembrado recientemente para luego no utilizarse. Incluso ya tiene hierbas altas que harían imposible la práctica del fútbol. Se pide un mantenimiento y un uso por el conjunto que lleva el nombre de Babilafuente por toda la provincia.
Sin embargo, a pesar de este hecho, seguirán dando guerra jueguen donde jueguen en una Primera División del Salmantino Vegapiel que se espera todavía más competida en la temporada que viene con los ascensos y descensos. Una Liga muy bonita que, como en tantos otros equipos, también sirve de excusa para luego pasar grandes momentos en el bar, en el tercer tiempo y en las cenas que se van realizando durante la temporada.
Pero el esfuerzo del campo no es el único que deben acometer. El conjunto se financia gracias a la ayuda de todos que ponen un dinero al comienzo de la temporada y también a la búsqueda de patrocinadores para los carteles que se realizan para los partidos. Por lo demás, un juego atrevido es lo que caracteriza al conjunto que busca la rapidez de sus delanteros como el arma más letal.
La plantilla está formada por Aarón y Viru (porteros); Jorge, Óscar, Gabri, Manuel, Pablo y Mario (defensas); Isma, Dani, David, Juan Carlos, Tete, Alexis, Alberto y Raúl (centrocampistas); Iván, Bryan, Samuel y Madavino (delanteros); Víctor, Juan Carlos y Fausti (delegados); Goyo (entrenador).
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