En este sentido, Del Arco espera poder reunirse con los jugadores pronto para explicarles que todo vuelve a la normalidad, mientras que un hermano de Hidalgo, Mario, el que negoció con Gustavo Siviero en Mallorca, se trasladará este domingo a la capital salmantina para buscar el acuerdo definitivo con el argentino y ‘apagar el fuego’ que por la mañana se había encendido.
Además, la dirección deportiva también ha podido conversar con Hidalgo. “Nos ha comentado que no le gustan estas medidas de presión con los plantes, pero que se respete lo acordado para no quedar mal con nadie”, exponían mientras respiraban calma, después de unas horas complicadas.
En la entidad esperan que este domingo se cierren definitivamente los contratos y que pueda llegar la normalidad. Pese a ello hay duda de si se entrenará o no en la matinal del domingo, aunque sí se intentará que sea como sea se juegue en Guijuelo por el compromiso adquirido, pero todo depende de las gestiones con el míster y los jugadores.
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