El Peñaranda tiene muy difícil permanecer un año más en Regional Aficionados. Una mala segunda vuelta, donde es el segundo peor equipo con diez puntos, solo por delante del Racing Benavente, le ha condenado a una situación muy complicada en la que está obligado a sumar los doce puntos restantes con los que, incluso, debería esperar resultados. Por delante suyo están la Medinense y el Navega, ya fuera del descenso, que le supera en tres puntos y tiene, además, ganado el gol average particular.
El calendario de los de Juanpi Jiménez es muy complicado. Esta semana deberá enfrentarse a Santa Marta, el mejor equipo de la temporada con diferencia que ha ido mejorando con el paso del tiempo. En la segunda vuelta los de Peque solo han recibido cinco goles mientras que ha anotado 42. Muy lejos quedan los números de los de Bracamonte con diez a favor y treinta en contra en los últimos 13 partidos. Tras este partido deberá viajar a León para enfrentarse a la Veguellina, después recibir al Navarrés y, por último, desplazarse a Valladolid para jugar contra el Universidad en lo que, esperan los peñarandinos, pueda ser un duelo directo.
La parte positiva viene por los posibles arrastres de Tercera en caso de que descendieran también de Segunda B. Los conjuntos luchando por las plazas inmediatamente superiores a las de descenso recaerían en el grupo A por lo que, en principio, solo deben centrarse en sus partidos.
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