Se fue de vacío tras haber recibido tres avisos. El público, de manera insistente, no paro de pedir el indulto para un gran novillo de Garcigrande que acabó de nuevo en los corrales. La normativa de espectáculos taurinos no permite indultos en plazas portátiles ni en festivales
Miróbriga vivió, este sábado, una de esas tardes para el recuerdo. Una vez más, su singular coso taurino volvió a llenarse de aficionados para presenciar el primer festival taurino que reunió la arena a Juan Diego, César Jiménez, Juan del Álamo y Álvaro Lorenzo.
El primero únicamente pudo cortar una oreja, por su buen hacer con la muleta y la estocada al primer novillo de la tarde. Pero la gran faena la protagonizó César Jiménez a un muy buen novillo de Garcigrande. Tal es así, que incluso la plaza entera protestó a la hora de entrar a matar. Una suerte que, tras tres avisos, no se produjo.
"Sí se puede", exclamó Miróbriga entera, pero lo que no pudo el diestro fue llevarse trofeo alguno al haber recibido tres avisos con los q el toro volvió a corrales en señal de un indulto camuflado. Cabe recordar que la normativa de espectáculos taurinos, y así se recordó por megafonía, prohíbe indultar a un toro si no se trata de una plaza fija.
El local Juan del Álamo, por su parte, tan solo pudo conformarse con una oreja. Se mostró muy voluntarioso y mató bien. Las mismas intenciones puso sobre el ruedo el joven Álvaro Lorenzo, que su mal acierto con la espada le hizo salir de vacío pero con la ovación de un respetable entregado.
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