Izquierda Unida de Béjar denuncia que "estos días de atrás hemos asistido, no sin asombro, a una serie de acontecimientos en cadena tras la celebración del Festival anual de Rock 'Abejarock', a cuyos organizadores felicitamos y a los que apoyamos incondicionalmente frente a las críticas y los ataques injustos que han sufrido a causa de unas pintadas desafortunadas ocurridas la noche del evento, de las que no se les puede ni debe hacer responsables".
Reprueban las pintadas que enaltecen a ETA, pero "algo no nos encaja cuando vemos las pintadas de la foto, que según vecinos, llevan meses ahí sin que a nadie le haya llevado a la indignación ni ninguna concejala del PP haya levantado la voz, como mujer y política, contra este tipo de insultos dirigidos contra otra mujer, también política. A un partido corrupto, como es el PP a nivel nacional, con decenas de casos abiertos por corrupción, no se le puede llamar corrupto pero a una alcaldesa de izquierdas si se la puede llamar ?puta y guarra? como se ve en la foto y a continuación, en la puerta de al lado, se puede jalear a Rajoy".
Añade que "Béjar, se ha hecho más patente en estos días, cabalga hacia una degeneración de la democracia y a la miseria moral más absoluta. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Béjar vive en los años 40, en los que una subvención sirve para hacerse una foto triunfal mientras ocho negocios de la misma calle anuncian su cierre, donde la suciedad viaria es demasiado visible, donde se inauguran murallas medievales en pleno siglo XXI, donde otra vez el machismo institucional considera oportuno traer a Yola Berrocal, la mujer que iba a poner de moda en España las tetas grandes".
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