Además, cabe destacar que ya hace tiempo que desde el servicio de Medio Ambiente han solicitado a la Junta poder hacer un control de los ejemplares la especie, ya que consideran que los ataques en el norte de la provincia así lo precisan, pero aún están a la espera de una respuesta de Valladolid.
No fue la primera vez que ocurría, la última fue el 14 de agosto. En la madrugada del martes "no un lobo, sino más", según afirmaron los vecinos, mataron a cerca de 40 ovejas en la localidad de Villaflores. El propio alcalde del municipio, Vicente José González, afirmó que a las cuatro y media de la mañana, cuando se dirigía al mercado de Salamanca, se encontró por el pueblo a tres o cuatro ovejas "y me pareció extraño". Sin embargo, al regresar de la capital se encontró con la noticia de que habían aparecido muchas ovejas muertas, otras malheridas y el resto estaban desperdigadas por el pueblo y por caminos colindantes. "De hecho todavía están buscándolas, porque no aparecen", destacaba Vicente González.
El rebaño de aproximadamente 180 cabezas pertenecía a un pastor del municipio de Poveda de las Cintas que tiene arrendada una finca en Villaflores. El máximo responsable del Consistorio señala que la situación es "preocupante, porque ya ha ocurrido otras dos veces en poco tiempo" y señala que si quieren "proteger al lobo que lo hagan, pero esto arruina a las familias".
Otros vecinos también comentaban la noticia, "es una barbaridad", señalaban. "El lobo ha podido estar por el pueblo tranquilamente durante la noche", afirmaba una vecina de Villaflores que se encontró una oveja en las inmediaciones de su domicilio al levantarse.
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