Como era de esperar, el debate sobre las ordenanzas fiscales en el que también se incluía la creación de una nueva relativa a los servicios especiales de la Policía Local, fue el más intenso de toda la sesión plenaria.

Según se explicó desde la bancada popular, los vecinos se beneficiarán de una congelación impositiva y una menor carga fiscal para muchos de ellos. Así, entre las ordenanzas modificadas, tal y como se aprobó en la votación posterior, figura la reducción del tipo de gravamen del IBI de naturaleza rústica que pasaría al mínimo, del 0,62 al 0,3. Con esta disminución, precisó la concejala Chabela de la Torre, ?se va a paliar el notable incremento de la carga fiscal sufrida por los propietarios de suelo urbanizable del municipio?. Se solventaría de esta forma ?esa subida provocada por la revisión catastral totalmente ajena al Ayuntamiento?.

Además, los cambios aprobados este jueves propiciarán un recargo del 50 % en el IBI para aquellas viviendas desocupadas de las que sean propietarias las entidades financieras. El objetivo es, explicaron, ?provocar una salida rápida de estos inmuebles al mercado?. 

A la vez se bonifica la mitad del mismo impuesto a aquellas empresas que generen empleos para el municipio. La bonificación llega al 95 % en el caso de las licencias urbanísticas para viviendas de protección que se suma al ya existente del 50 % del Impuesto de Construcción. Todo ello supone, destacan, ?un incentivo sin precedentes para la construcción en el municipio de viviendas sujetas a régimen de protección?.

La modificación plantea, además, un incremento en el porcentaje de bonificados por apertura de establecimientos, que pasa del 50 al 95 % para los vecinos que se acojan al pago único del paro para convertirse en autónomos.
 
Reacciones de la oposición

Desde Izquierda Unida se ha querido plantear un voto particular, al igual que desde la bancada de los concejales no adscritos, para quienes la nueva ordenanza de servicios especiales policiales ?supone un alto coste?. En cualquier caso, remarcaron que sus prioridades no concuerdan con las del equipo de Gobierno. Un caso parecido al de IU, que prefirió aparcar este jueves su histórica reivindicación sobre el estudio para aplazar el pago de la cuota de basura, para centrarse en otra vieja petición, la de la progresividad fiscal, ?un criterio fundamental de la izquierda?.

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