Los alumnos del grado en Filosofía, grado en Humanidades y Bachiller y Licenciatura en Filosofía han presentado el decimosexto número de la revista El Mirador. La publicación diseñada y redactada por los alumnos de la Facultad de Filosofía, surge con el propósito de incentivar la investigación de los estudiantes y permite que los trabajos desarrollados sean compartidos por otras Facultades y ámbitos del saber. La revista se desarrolla en formato de artículo científico, en el que cada alumno desarrolla un tema concreto.
El decano de la Facultad de Filosofía ha afirmado que "frente a la visión pragmatista y economicista de la sociedad, este proyecto defiende un saber, que antes de ser un poder, es un bien, un fin en si mismo". El decano está convenido de que "si se asume este principio se podrán sacar las fuerzas necesarias para emprender la renovación humanista y el adecuado cultivo de las Humanidades que hoy necesitamos".
La directora y jefa de redacción, Melanie T. Cruz, ha destacado "el propósito de incentivar a los alumnos en la investigación a través de sus estudios y de su propia iniciativa, posibilitando que otras facultades conozcan otros ámbitos del saber". La directora ha afirmado que en este número sobresale la variedad notable en los escritos y la madurez científica de los alumnos en la presentación de sus trabajos. "Nuestra ocupaciones no se interpongan en la publicación de esta revista", dijo.
Cruz se ha referido también a la crisis de las Humanidades, poniendo en evidencia la injuria del sistema educativo, al relegar asignaturas como la Literatura e Historia del Arte, y la Filosofía como una asignatura marginal "es posible que muchos de los males de la sociedad tengan que ver con el abandono de las Humanidades, estrechamente vinculadas a los valores morales que sustentan nuestra civilización", afirmó. "Hay mucho más saber acumulado en la Ilíada o la Divina Comedia que en todas las redes sociales", insistió. "Los alumnos somos el futuro, y quienes debemos dar a las Humanidades el lugar que se merecen", concluyó.
Por último, el delegado de la revista, Francisco Fernández-Jardón Álvarez, ha destacado el rigor y el carácter de El Mirador, publicación vivida desde la perspectiva de los alumnos. "Su nota distintiva es su libertad y falta de institucionalización" añadió.
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