Este miércoles el diputado de cultura, Julián Barrera, ha presentado junto al autor, Ricardo López, la segunda iniciativa de la Diputación en el mes de diciembre tras la exposición de Agustín Casillas.
Se trata de la novela ‘Historias de la señora Patanakis’, que mezcla arte y literatura. Con esta obra, el escritor ha querido rendir homenaje a su amigo, el pintor salmantino Zacarías López, fallecido en 2003. Este artista gozaba de dos facetas, la pictórica y la literaria, aunque se complementaban entre sí, puesto que “sus cuadros potencian la literaria”.
La Diputación ha editado 300 ejemplares, que estarán a la venta en las librerías a un precio de 12 euros cada uno. El libro pertenece a la serie de autores Salmantinos.
Ricardo López explicaba el proceso de creación de la novela desde sus inicios. ¿Por qué eligió el apellido Patanakis? Porque se repite en ocho de los cuadros del pintor, por lo que a raíz de ahí fue trazando la historia, centrándose en la viuda de la familia –uno de los cuadros se llama Retrato de la viuda del ilustrísimo señor don Constantino Patanakis-.
Cada capítulo lleva el nombre de uno de los cuadros seleccionados: “esto fue lo más difícil”, asegura el autor. Y no solo se inventó la historia de la familia con los detalles de los nombres, sino que López quiso anclar a la realidad la historia introduciendo personajes históricos reales. Y, aunque no ha querido desvelar el final, ha dado un detalle curioso: está basado en “uno de los mejores cuadros de Zacarías”, con un nicho de cementerio vacío, que ha sido ocupado pero que espera a su próximo ocupante.
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