Las alarmas saltaron ayer a mediodía en Salamanca. La Policía recibió varios avisos alertando que Carles Puigdemont, expresidente de la Generalitat, se encontraba en la Plaza Mayor de la ciudad charra disfrutando de un paseo y rodeado por un puñado de personas.
Rápidamente los agentes se dirigieron hacia el ágora salmantina, pero cuando llegaron el político se había marchado, consciente de haber sido descubierto. Sin embargo, varias fueron las personas que lograron fotografiar al antiguo alcalde de Girona mientras disfrutaba de la navideña Plaza salmantina antes de emprender la huida.
Según ha podido saber SALAMANCA24HORAS, el gerundense ha pasado por la capital del Tormes en su regreso a Cataluña, a donde se dirige para ser, presumiblemente, investido de nuevo como presidente de la Generalitat. Cabe recordar que la candidata de Ciudadanos, Inés Arrimadas, se impuso en los comicios catalanes, tanto en votos como en escaños, pero tiene muy difícil formar gobierno.
El motivo por el que Puigdemont ha escogido esta ruta es la fuerte vigilancia policial existente en la frontera entre España y Francia. Así, el político catalán tomó un avión desde Bruselas con destino Lisboa y, desde allí, ha emprendido el rumbo hasta su tierra en un vehículo, tal y como hiciera para abandonarla hace unas cuantas semanas hacia Marsella.
Reuniones con políticos salmantinos
Por otro lado, según ha podido averiguar este medio, la visita de Carles Puigdemont no fue meramente turística, ya que también aprovechó su estancia en Salamanca para mantener reuniones con políticos charros con el objeto de resolver el conficto creado en torno a los papeles del Archivo.
Por el momento, se desconoce lo que el catalán exige a cambio de la devolución de tales documentos, aunque su circulo más cercano sí ha deslizado que no le gustaría que el caso volviera al primer orden informativo como ha ocurrido en Sijena, ya que vuelve dispuesto a lavar la imagen del 'procés' para hacerlo más plausible.
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