La feria taurina de Ledesma un año más dio el pistoletazo de salida. Con la plaza casi llena, comenzaba el esperado mano a mano entre Sebastián Castella y López Simón.
El primero en recibir a los de El Pilar fue Castella. Un animal algo bruto de salida, al que le costó fijarse en la capa del diestro. Vimos a un Sebastián persistente durante toda la faena, intentado sacar lo bueno que tenía el animal. Destacar varias series de derechazos. Finalmente se llevó una ovación.
Turno ahora de López Simón. Con la plaza totalmente entregada comenzó a torear a este segundo. Pudimos ver su buen toreo, brillantes series dejó en el coso con la derecha. Se arrimó con valentía y cuajó una buena faena. Una oreja le cortó al animal.
El tercero de la tarde ya salió cojo desde toriles, por lo que uno de los sobreros tomó el relevo. Dejó notable su destreza con el capote, y con clase dio unos quites por chicuelinas. Ya en la faena, de primeras dejaba unas series con la derecha, que serian lo mejor, ya que poco a poco se enfriaría.
De nuevo Simón, que recibía a un toro que iría de menos a más, pero al que le faltaba transmisión. Una faena con poco picante y que no llegaba a tener continuidad. Dio muerte al animal y tras varios avisos se llevaría una ovación.
Último animal para Castella, castaño el quinto de la tarde. Unos capotazos con clase, que llevaban a unas templadas verónicas. Tras brindar al torero Alberto Revesado, comenzó a torear a un animal noble pero con poca fuerza. Mala suerte tuvo el diestro en esta tarde. Bien al natural, alguna tanda le pudo dar. Ovación.
Cerraba la tarde Alberto López Simón. Y la cerraría por todo lo alto. Una gran faena que cuajó a este de El Pilar. Un entregado López Simón, que hilvanó con temple la faena. Sin duda lo mejor de la tarde. Desorejó al sexto de la tarde ante una volcada afición.
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