Ciencia, arte y fe restauran un milagro de madera y viento: así renace el órgano de la capilla de la Universidad de Salamanca
Alejandra del Barrio Luna, Ana Caramanzana Santamarta y Berchtold Soergel Zwoelfer y Cascón han sido los encargados de llevar a lo más alto de la institución académica de Salamanca un instrumento de gran valor histórico y patrimonial

La Universidad de Salamanca ha presentado toda la información necesaria para conocer de primera mano cómo será el proceso de restauración del órgano de la capilla situada en las Escuelas Mayores de la institución académica pública de la capital del Tormes.
De este modo, a través de las manos y conocimientos de Alejandra del Barrio Luna, restauradora y conservadora; Ana Caramanzana Santamarta, organera y musicóloga y Berchtold Soergel Zwoelfer, maestro organero y constructor de pianos y claves; y el restaurador Cascón; llevarán de nuevo a lo más alto de la ciudad una obra no sólo considerada musical, sino histórica y arquitectónica.
La propia subdelegada del Gobierno en Salamanca, Rosa López, ha indicado que “este proyecto entra dentro del presupuestado para este órgano, otro en la Universidad Pontificia de Salamanca y otra en Vitigudino”. Así, a través de un excedente en la economía destinada anualmente, se han podido financiar este tipo de obras culturales.

Para el órgano de la capilla de la Universidad de Salamanca se han asignado 77.123 euros, de cara no solo a restaurar, sino para lograr investigar este instrumento histórico construido por la familia Echevarría en 1709, antiguo organero real considerado por mucho el Stradivarius de los órganos en España.
Según han explicado a SALAMANCA24HORAS, por aquel entonces se pagaron 12.750 reales de vellón a Echevarría, mientras que al maestro Gambón, mazonero, tracista y arquitecto que trabajó en el mismo en 1702, se le pagaron 1850 reales de vellón.
Es un órgano pequeño, pero con grandes posibilidades musicales
Del mismo modo, Ana Caramanzana ha explicado que “es un órgano pequeño, pero con grandes posibilidades musicales”, y aunque el “estado está muy deteriorado por el tiempo y su uso”, se va a conseguir restaurar para otorgar el gran valor que tuvo en el siglo XVIII. Según han indicado en la propia rueda de prensa, el objetivo es que esté restaurado para diciembre de 2025, de cara a la festividad de Santo Tomás.
Entre los daños que se han registrado por el tiempo, se han encontrado algunos por termitas, desviaciones estructurales, hierros oxidados, golpes por el uso y desprendimiento de los elementos decorativos por los encolados. De cara a la reconstrucción que se realizará, se harán tres fase: una primera en la que ya se ha estado trabajando que consiste en el desmonte del órgano; una segunda donde se realizará la reconstrucción de 615 tubos de viento que se han retirado para su tratamiento; y un tercero de reensamblaje y armonización del mismo.

De esta forma, esta gran obra construida en madera de pino y con elementos decorativos como el escudo de la Universidad de Salamanca, manzanas, uvas y otros detalles excepcionales, servirá para “no solo recuperar un instrumento musical, sino una parte vital del patrimonio histórico y universitario de Salamanca” combinando investigación, técnica y sensibilidad patrimonial. Asimismo, se respetarán todos los criterios mínimos establecidos de cara a volver a disfrutar de uno de los símbolos que han marcado la historia de la capital del Tormes.
También te puede interesar
Lo último