Así, explica que el protocolo establece y sistematiza el procedimiento de actuación ante diferentes casos, pero no obliga, en ningún caso, a las víctimas a ajustarse a ningún reglamento. Es, según insiste el Gobierno Municipal, un documento de coordinación interna para ofrecer un mejor servicio. Y está, además, enmarcado en la actuación establecida ya entre la Policía Local y la Policía Nacional gracias al acuerdo suscrito entre el Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno.
"El documento no sólo reglamenta la atención y la protección de las víctimas, sino que promueve también la coordinación de las acciones de sensibilización, prevención y formación que impulsa el Ayuntamiento de Salamanca para fomentar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres y prevención la violencia de género", concluye el equipo de Gobierno.
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