En ese sentido, el gasto medio ha ido reduciéndose, según los datos de la organización, desde hace seis años, cuando alcanzó los 122 euros. En 2008, disminuyó hasta los 120 euros; en 2009, hasta los 100 euros; en 2010, hasta los 92 euros, y en 2011, hasta los 81. Sin embargo, en 2010 los ciudadanos de la Comunidad dedicaron 87 euros, una cantidad que este año se rebajó en diez euros.
Respecto al gasto por comunidades autónomas, Madrid con 95 euros y Valencia con 87 son las autonomías donde más se gastará. En el otro extremo se sitúan Canarias (72 euros) y Castilla la Mancha (74 euros). En todas se producirá un “fuerte” descenso del gasto, si bien parece más acusado en algunas como Andalucía, Asturias y Cataluña. Por el contrario, el País Vasco es la comunidad donde menos se reducirá el consumo.
La Federación de Usuarios-Consumidores recordó que los descuentos nunca deben repercutir en la calidad y recomenzó revisar con atención la etiqueta, en la que debe figurar la talla, la composición y el tratamiento aconsejable de lavado. Además, indicó que el producto debe llevar tanto el precio rebajado como el anterior, o en su defecto, el porcentaje de rebaja sobre el original. Además, precisaron que si el comercio acepta tarjetas de crédito habitualmente también lo debe hacer durante el periodo de rebajas.
Finalmente, la organización apuntó que la garantía mínima del artículo es de dos años y aconsejó exigir que si normalmente se devuelve el dinero, también en rebajas, y que el justificante de compra es la única garantía ante una posible devolución.
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