El hasta hoy secretario general del PSOE de Castilla y León y actual secretario de Organización socialista, Óscar López, defendió la gestión de su Ejecutiva ante el duodécimo congreso e hizo autocrítica por los malos resultados. Óscar López volvió a reconocer que “no hemos cumplido los objetivos electorales”, y a continuación declaró que se ha dejado la piel en el intento: “Todos los días he pensado qué más podía hacer”, al igual que su Ejecutiva y “los muchos y buenos alcaldes con una excelente gestión, que también perdieron las elecciones de una manera inmerecida.”
El dirigente socialista reiteró su compromiso con Castilla y León al servicio de la nueva Ejecutiva autonómica y de las más de 400.000 personas que votaron al PSOE. López advirtió que los compromisos hay que mantenerlos antes y después de llegar a los cargos. “Por eso le pedí a Rubalcaba, antes de aceptar el cargo de secretario federal de Organización del PSOE, seguir como portavoz en las Cortes de Castilla y León.”
El todavía secretario general del PSOECyL advirtió a los delegados del duodécimo congreso que “no debemos cometer dos errores: echar balones fuera, culpando a otros de nuestros malos resultados; y pensar que Castilla y León es de derechas.” A este respecto, recordó que en 2011, Castilla y León fue la quinta Comunidad con más voto socialista, a pesar de un ciclo electoral muy duro, marcado por la crisis. Óscar López defendió el trabajo de su Ejecutiva y del Grupo Parlamentario en las Cortes de Castilla y León. “Han sido 1.300 días de trabajo con honradez, con lealtad y con fidelidad a nuestros principios y valores, que son innegociables.” Tras señalar que la política no es solo gobernar, reivindicó la oposición útil realizada por los socialistas en la Comunidad.