"La formación cristiana de los jóvenes y los niños se convierten para Joaquín en una necesidad apremiante. Ponerla al alcance de todas las clases sociales es una tarea difícil pero con la Providencia de Dios todo es posible. Y Joaquín funda la Congregación de Misioneras de la Providencia para hacer realidad esta misión", explican desde la congregación.
Al llegar este cincuentenario, todos los colegios de Misioneras de la Providencia de los distintos lugares de España y América quieren recordarlo y agradecer a Joaquín "su entrega incondicional y el carisma que nos dejó". Para ello, este martes un grupo de alumnos de diferentes colegios se han unido a los alumnos del colegio de Salamanca para celebrar una serie de actos.
En primer lugar, una peregrinación, por grupos de cinco, en la que unos mil alumnos han recorrido los lugares más emblemáticos de la vida de Joaquín. A las 13:30 celebraron la Eucaristía de Acción de Gracias en la Parroquia de la Purísima. Tras la comida, a las 16:30 horas, se concentraron en la Plaza Mayor para hacer un manifiesto de gratitud a Joaquín Alonso Hernández.
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