El Juzgado de Primera Instancia número 2 de Salamanca ha fallado a favor de Banco Ceiss (España-Duero) ante la denuncia presentada por un vecino de Matilla de los Caños del Río de 89 años para reclamar 38.000 euros de obligaciones subordinadas que se adquirieron en julio de 2009. El juez desestima la demanda presentada al considerar que “la entidad bancaria no sólo proporcionó información verbal y clara del producto sino también escrita de conformidad con la legislación vigente”.
Explica la sentencia que “cuando un contrato se celebra por escrito, se formaliza en documento sea éste público o privado, es mediante la firma como se hace constar que el contratante presta su consentimiento y asume así las obligaciones que para él dimanan del contrato celebrado”. En este caso, el juez considera que el firmante sabía los riesgos a los que se exponía, pues así se lo manifestó la propia entidad financiera, prestando su consentimiento “bajo su responsabilidad”, rubricándolo con su firma.