El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicó este jueves la intención de voto tras las elecciones generales del pasado 20 de diciembre, justo antes de tomar posesión diputados y senadores. El Partido Popular (PP) continúa al frente, pero ya no por delante del PSOE, sino de la suma de Podemos y sus confluencias en Cataluña, Galicia y Comunidad Valenciana, por lo que hay matices que cabe destacar.
El primero, que el bipartidismo de populares y socialista sigue perdiendo votos. El PP sobre todo en favor de Ciudadanos, según afirma el 5% de quienes le respaldaron en las elecciones generales y ahora se decantarían por el partido de Albert Rivera. Teniendo en cuenta que este barómetro se realizó entre el 2 y 11 de enero, antes de que estallara la nueva trama de corrupción en Valencia y de que Rajoy declinara ser propuesto para presidente del Gobierno al no contar con los apoyos suficientes en el Parlamento.
Pero peor es la situación del PSOE, que se dejaría más de un 8% entre las diferentes marcas de Podemos, lo que sin duda influye en que el partido de Pablo Iglesias sea ahora el segundo en intención de voto por detrás del PP. Pero los socialistas también pierden apoyos para irse a Izquierda Unida y Ciudadanos. Al igual que los populares, con una encuesta sin tener en cuenta la realidad actual, a favor de Pedro Sánchez que negocia para ser presidente del Gobierno, pero en contra todas las luchas internas que hay en el partido a raíz de una posible coalición con Podemos.
Precisamente la formación de Pablo Iglesias es la más beneficiada tras las elecciones, según este barómetro, y eso que casi un 10% de sus votantes afirma que ahora apoyaría a Izquierda Unida-Unidad Popular, cuyo candidato, Alberto Garzón, es precisamente el más valorado entre todos los líderes políticos.
Finalmente, Ciudadanos crece ligeramente en intención de voto, sobre todo, como se ha mencionado anteriormente, por arrebatar apoyos procedentes del Partido Popular. Sin embargo, los pierde entre sus votantes de izquierdas, pues hasta un 8% se decantaría ahora por el PSOE o por Podemos y sus marcas.