En concreto, Mercasa quire afrontar una reestructuración comercial que permita relanzar el centro comercial, acometiendo inversiones para la ampliación del aparcamiento y la remodelación del edificio, así como amortizar las cantidades invertidas. Hasta la fecha se han invertido 8,8 millones de euros en este centro comercial, a los que se sumarán 2,1 millones de un nuevo supermercado que prevé crear 35 puestos de trabajo, según explicó el concejal de Economía y Comercio, Enrique Sánchez Guijo.
El edil explicó que al Ayuntamiento esta ampliación de la autorización no le supone coste alguno, "porque comprar el centro hoy por hoy no es viable, tampoco venderlo, pero lo que no podemos es no hacer nada". Respondía así al portavoz socialista sobre algunas dudas normativas, aclarando que la ampliación de la concesión no vulnera la libre concurrencia, pues no se rebasa el plazo máximo de 99 años establecido por la ley. De este modo, al ser Mercasa una sociedad mercantil integrada en el sector público estatal a través de la SEPI, en términos jurídicos resultaría admisible una nueva adjudicación directa, por lo que una ampliación del plazo de duración de la concesión ya existente no vulnera la libre concurrencia de terceros.
Fue el 19 de mayo de 1982 cuando se firmó un convenio entre el Ayuntamiento de Salamanca y Mercasa para la construcción y explotación sobre una finca municipal en la avenida de Los Cipreses del entonces denominado Merca 80-Garrido. El plazo inicial del derecho de superficie fue ampliado en veinte años más en septiembre de 1984, siendo ratificado el convenio en febrero de 1999, momento en que se transformó en el centro comercial Los Cipreses. Una zona con unos 6.500 metros cuadrados, una treintena de tiendas y locales comerciales, seis salas de cine y un aparcamiento.
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