Además, la principal causa del descenso, si bien sigue siendo la misma, también varía significativamente en cuanto a sus cifras, ya que mientras en 2011 era un 28% la que atribuía la bajada en sus compras navideñas a problemas económicos (bajada de ingresos, desempleo…), para este año la cifra sube 36 puntos, hasta el 64%. Con estas perspectivas, se consolida la opción de que las familias desembolsarán menos de 500 euros de gasto en Navidad, siendo la opción elegida por más de la mitad de los encuestados, frente al 38%de 2011.
Pese a todo, habrá sectores que apenas sufran los recortes y, en este sentido, hay buenas noticias para los más pequeños, ya que los juguetes (2,2%), junto con las comidas familiares en casa (2,5%), son los grupos en los que una menor parte de ciudadanos piensan gastar menos. Frente a esto, el resto de regalos (30%) y el ocio (30%) serán los grandes perjudicados por la bajada del consumo. Como viene ocurriendo en las últimas encuestas realizadas, la amplísima mayoría de consumidores evitará endeudarse para hacer frente a los gastos de estas fechas, ya que casi un 95% cree que no tendrá que recurrir a dinero extra.