La crisis ha trastocado los planes veraniegos de los ciudadanos, que han tenido que reducir sus vacaciones, o en el peor de los casos, suprimirlas. Debido a la mala situación económica, muchos salmantinos han tenido que tomar la decisión de destinar sus ingresos a la familia y privarse de vacaciones.
A pesar de todo, aún hay muchos ciudadanos que aprovechan el periodo estival para viajar y disfrutar de algunos días de relax, eligiendo como destino, principalmente, la playa. Los salmantinos aprovechan esta época para visitar la costa puesto que durante el resto del año disponen de destinos de interior más accesibles y cercanos para visitar.