Alba de Tormes impulsa su legado cerámico con la reforma del Museo de Alfarería gracias al proyecto CeramiTUR
La iniciativa, financiada por fondos europeos y liderada por la Asociación Española de Ciudades de la Cerámica, busca convertir la tradición alfarera en un atractivo turístico de calidad y accesible para todos.
El Ayuntamiento de Alba de Tormes ha anunciado el inminente inicio de las obras de mejora en el Museo de Alfarería, una intervención que forma parte del ambicioso proyecto CeramiTUR, cuyo objetivo es revalorizar el patrimonio cerámico como motor turístico y económico en localidades con fuerte tradición alfarera.
Concepción Miguélez, alcaldesa del municipio, ha explicado que, una vez completados los trámites administrativos, comenzarán los trabajos de adecuación en el museo. Las actuaciones previstas incluyen la instalación de una nueva cancela de acceso, intervenciones en la red eléctrica para optimizar la iluminación, y la mejora del área destinada a talleres.
Además, se incorporarán elementos que favorezcan la accesibilidad, como señalización en braille, y se crearán espacios más funcionales que permitirán la realización de actividades participativas con la cerámica como protagonista. Estas acciones suponen el primer paso del plan en Alba de Tormes dentro del proyecto CeramiTUR, financiado por la Unión Europea mediante los fondos Next Generation EU y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, en el marco del programa Experiencias Turismo España 2023, línea INNOVA.
CeramiTUR está liderado por la Asociación Española de Ciudades de la Cerámica (AeCC) y el Ayuntamiento de Talavera de la Reina, junto a otras ocho localidades españolas con una arraigada tradición ceramista: Agost, Bailén, La Bisbal d’Empordà, La Rambla, Manises, Mota del Cuervo y Onda. Todos estos municipios colaboran en la creación de una estrategia común cuyo eje vertebrador será la Ruta de la Cerámica, un itinerario turístico y cultural de alcance nacional.
En el caso de Alba de Tormes, el proyecto contempla, además de la reforma del museo, la organización de talleres cerámicos dirigidos a la población local, la combinación de productos turísticos con gastronomía y alojamiento, y la mejora general de los recursos dedicados a la promoción del patrimonio alfarero.
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