Los niños de la ludoteca de Alba de Tormes exploran la biodiversidad de la Laguna de la Dehesa

Durante la visita se puso de manifiesto el valor de los humedales en la adaptación y lucha contra el cambio climático

Visita al humedal de la Laguna de la Dehesa y el observatorio de aves
Visita al humedal de la Laguna de la Dehesa y el observatorio de aves | Casa Molino

Los participantes de la ludoteca municipal de Alba de Tormes han tenido la oportunidad de sumergirse en la naturaleza local con una visita al humedal de la Laguna de la Dehesa y su observatorio de aves, un espacio natural recientemente restaurado.

Este humedal, recuperado gracias al Plan de Sostenibilidad Turística en Destino financiado con fondos europeos Next Generation, representa uno de los ecosistemas más característicos de la ribera del río Tormes. Durante la jornada, los jóvenes exploradores, acompañados por Santiago Domínguez, técnico de medio ambiente del consistorio albense, aprendieron sobre los recursos naturales del entorno, observaron diversas especies de aves sin perturbar su hábitat e iniciaron su identificación gracias a los materiales divulgativos y paneles interpretativos disponibles.

Manuel Juanes, concejal de Medio Ambiente, resaltó "la importancia de que, desde edades tempranas, se descubra la riqueza natural del entorno más cercano y aprender así a respetar y proteger la biodiversidad". Por su parte, la alcaldesa de Alba de Tormes, Concepción Miguélez, enfatizó que "la recuperación de la Laguna de la Dehesa representa un compromiso con la conservación del medio ambiente y un recurso de educación ambiental que se pone al servicio de la ciudadanía y visitantes".

La visita también sirvió para subrayar el valor de los humedales en la adaptación y lucha contra el cambio climático. Se destacó cómo, en el pasado, muchas charcas y marjales de la ribera del Tormes fueron desecadas por considerarse improductivas. Con la restauración de este ecosistema único, se recupera un refugio vital para la biodiversidad, donde prosperan aves como carriceros y lavanderas, anfibios como ranas y gallipatos, y reptiles como el galápago europeo.

El observatorio de aves, también financiado por los fondos Next Generation, se consolida como un nuevo recurso clave para la educación ambiental y un atractivo punto de interés para quienes visitan Alba de Tormes.

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