Un servicio esencial para las zonas rurales deSalamanca como es el que prestan las Oficinas Comarcales de Agricultura, seestá viendo mermado por la política de personal que mantiene la Consejería deAgricultura en los últimos años.
La ya de por sí ajustada plantilla de personal con quecuentan las oficinas de Agricultura en nuestros pueblos se ve diezmada enépocas como el verano y durante las ferias de ganado en la capital. Es en estosperiodos de tiempo cuando más castiga la Junta a los agricultores y ganaderosdejando sin personal suficiente para atenderles en las oficinascomarcales.
La Junta ha ido reduciendo la plantilla de Agriculturaen la capital por lo que se hace necesario el desplazamiento de trabajadores delas oficinas comarcales como Peñaranda de Bracamonte, Ledesma o Guijuelo, hastaSalamanca.
Las oficinas de los pueblos ya arrastran la escasez de personal para atender las necesidadesde sus propias comarcas pero, aún así, la Junta las deja casi vacías con elconsiguiente abandono de la población rural a la que tanto dicen defender.
Para elcorrecto funcionamiento del mercado semanal, que mueve más de dos mil (2000)cabezas de ganado, de la feria monográfica y de otros certámenes y exposicionesde ganado que se celebran en Salamanca, y para el obligatorio control de losanimales que se mueven en estos eventos, es imprescindible el trabajo delpersonal administrativo, además del personal veterinario, de la Junta de Castilla y León en Salamanca.
Los problemas más importantes del personal de laConsejería de Agricultura en Salamanca y provincia son que:
Quienes se ven obligados a trasladarse al mercado deganados de Salamanca para las ferias y exposiciones tienen que trabajar bajomucha presión ya que hay que grabar las entradas de más de 2300 animales (loque es controlar y elaborar la documentación identificativa de todos) en menosde tres horas, sin poderse levantar ni un instante, ni tan siquiera para ir albaño.
Al poco determinar de completar la documentación de todos los animales que entran, debenpreparar las tasas de salida de los animales que han entrado.
Se trabaja a un ritmo frenético ya que la falta de organización provoca quetodos los ganaderos y tratantes quieran recoger los documentos lo antesposible, presionando sin parar a los empleados públicos que deben velar por queel control del ganado se haga con garantías.
Por eso, CCOO considera necesario más personal administrativo del que sedestina a esas tareas en la capital, lo que evitaría dejar sin servicio a lospueblos.
Asimismo,CCOO insta a la Junta a mejorar las condiciones de su personal en las oficinasde la provincia dotando las instalaciones de los medios técnicos y humanosnecesarios y adecuados.
Que losvehículos en los que se hace viajar a estos trabajadores al menos cuenten con unascondiciones adecuadas para soportar los viajes, sobre todo en horas de máximastemperaturas.
CCOO considera fundamental dotar elmedio rural de Salamanca de servicios públicos de calidad por lo que pide a laJunta de Castilla y León que se ponga a trabajar de verdad en reforzarlos conhechos, más allá de discursos cargados de buenas intenciones.
CCOO denuncia, por último, la escasa o nulacoordinación entre Administraciones públicas en la organización de eventos relacionadoscon el sector agroganadero, lo que sin duda impide mejorar la calidad y elservicio a nuestros pueblos y sus gentes.