Los ganaderos han mostrado su disconformidad con el proyecto del Real Decreto por el que se pretenden establecer las normas básicas de ordenación de las granjas de bovino ya que aseguran que se ha basado en los existentes para porcino, gallinas y conejos, cometiendo errores tan básicos y de libro, dado que no tienen nada que ver las explotaciones de vacuno con están ni por enfermedades infecto contagiosas que puedan subir ni desde el punto de vista medioambiental por las ni deyecciones ni contaminantes de estas explotaciones y de las de vacuno.
Como primer error grave que tiene este RD, asegura UPA Salamanca, es no diferenciar entre explotaciones ganaderas extensivas e intensivas, metiéndola todas en el mismo saco y estableciendo la misma distancia entre unas explotaciones de vacuno y otras y tomando como distancia 500 mts. De aplicar esta distancia de las instalaciones de una explotación a otra, supondría que en muchos de nuestros municipios salmantinos no cabrían ni la mitad de las explotaciones existentes y no se podrían ubicar otras nuevas, con lo que "el relevo generacional a través de la incorporaciones de jóvenes en esos pueblos no sería posible".
Según la entidad, el proyecto comete el error que han corregido las normativas provinciales y en Castilla y León a través del RD 4/2018, y es el de "establecer una distancia respecto a los cascos urbanos de 500 m., lo que dificultara o imposibilitara la ubicación de explotaciones, por lo que los ganaderos que de ellas pensaran vivir, tendrán que irse, o sea les echamos del pueblo, ¿y luego se preguntan de porqué la España vaciada? En UPA Salamanca lo tenemos claro, por vosotros, los políticos".
El decreto pretende que la explotación cuente con instalaciones cubiertas con una superficie tal que permita alojar todos los animales bovinos (vacas y crías) en caso de tener que confinarlos. "Esto demuestra el desconocimiento de los redactores de este borrador de lo que es el vacuno extensivo", aseguran. Establece que para las zonas de especial incidencia en enfermedades o con un contacto estrecho con la fauna silvestre, la autoridad puede obligar a que se instalen bebederos o comederos diseñados especialmente para limitar el contacto entre las distintas especies y "no hay ningún tipo de bebedero o comedero donde pueda comer o beber un ternero e incluso una vaca y no pueda entrar a comer un ciervo, jabalí, gamo o corzo, e incluso la zorra".
Por estos puntos y otros muchos que demuestran el desconocimiento de los redactores de este proyecto de las explotaciones de ganado vacuno, de su ubicación, etc y sobre todo de lo que es una explotaciones ganadera extensiva, UPA Salamanca solicita la retirada de este Real Decreto, y que se cree una mesa de trabajo con el sector antes de proponer un nuevo borrador que sea real y aplicable.