Inmediatamente se personaron en el lugar los bomberos para comprobar el estado, además de una patrulla de la Policía Local, a la espera de vallar la zona, tal y como se halla un tramo de este muro unos metros más.
Esta zona de la antigua muralla que fortificaba la ciudad es de propiedad municipal, y el alcalde Carlos Martínez Mínguez aseguró tras el derrumbe del lunes, que habían solicitado presupuesto económico para las reparaciones pertinentes y consolidar el resto. Las inclemencias meteorológicas se han adelantado.
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