Tres de cada cuatro habitantes de la región no están conformes con vivir en Castilla y León

Castilla y León se sitúa entre las comunidades autónomas con menor grado de satisfacción residencial. Solo el 27 % de los castellanos y leoneses afirma estar plenamente satisfecho con su lugar de residencia, lo que refleja una mayor predisposición al cambio respecto a la media nacional.

El informe, que analiza anualmente la percepción de los ciudadanos sobre su vivienda y entorno, muestra que Castilla y León se encuentra junto a Madrid, Castilla-La Mancha y Extremadura como una de las regiones donde más población consideraría mudarse. A nivel nacional, el 51 % de los españoles se plantea cambiar de comunidad autónoma, aunque este porcentaje ha descendido tres puntos respecto al año anterior.

Entre los destinos más deseados para una futura mudanza, Andalucía vuelve a liderar el ranking con un 9 % de las preferencias, seguida de Asturias, el País Vasco y las Islas Canarias. La satisfacción con el entorno parece estar influida por factores como el clima, la calidad de vida o la identidad cultural.

Este bajo nivel de arraigo en Castilla y León coincide con una tendencia ya conocida: el progresivo envejecimiento y la despoblación del medio rural, que siguen marcando el reto demográfico de la región.