Galatasaray 70 (23+17+12+18): Zellous (19), Torrens (9), Alben (8), Lyttle (13) y Yilmaz (10) –quinteto inicial-. También jugaron Bone (11), Sencebe (0), Caglar (0) y Kymiacioglu(0).
Perfumerías Avenida 61 (11+19+19+12): Marta Xargay (11), Marta Fernández (2), Shay Murphy (23), Angelica Robinson (11) y Marija Rezan (6) –quinteto inicial-. También jugaron Mariona Ortiz (3), Leonor Rodríguez (3), y Krystal Thomas (2).
Crónica
Extraño partido el disputado en el Abdi Ikpeci que abre una puerta a la esperanza. Galatasaray ganó, como era de esperar, pero sufrió mucho más de lo que dice el marcador. Perfumerías Avenida tuvo una gran oportunidad para hacer la machada y además después de una extraordinaria remontada. Después de ir cayendo por diferencias cercanas a los quince puntos, el equipo de Víctor Lapeña metió el miedo en el cuerpo a Galata. Su gran tercer cuarto le puso por delante en el marcador y provocó el colapso en un equipo hecho para ganar la competición.
Nada presagiaba algo así después de un inicio devastador de las turcas que arrancaron con un 15-2. Avenida entró en el partido con demasiado respeto y concedió numerosas canastas fáciles. Zellous aprovechaba una y otra vez el juego rápido de su equipo y era secundada, aunque a rachas, por Alba Torrens y Sancho Lyttle.
A las salmantinas les costó mucho entrar en el partido y lo fueron consiguiendo poco a poco gracias a Xargay y Murphy. La defensa empezó a endurecerse y entró en escena Angel Robinson. Con su aportación el partido ya no era tan claro para Galata y las diferencias se estabilizaron en diez puntos.
Fue en el tercer cuarto cuando Avenida dio el golpe en la mesa. Murphy demostró una vez más que es una de las jugadoras de la competición y una racha excepcional, sumada a una excelente defensa colectiva, provocó el desplome de Galatasaray. Las locales no veían aro y no sabían qué hacer. Perfumerías se puso por delante, pero la diferencia le duró muy poco.
Apareció Zellous y un mal inicio de último cuarto de las salmantinas. Duró tan poco la ventaja charra, que a Galatasaray no le dio tiempo a sentir miedo. La gran remontada se escapó y el 1-0 está encima de la mesa, pero queda la sensación de que la diferencia entre los dos equipos no es ni mucho menos tan grande como podía parecer.