El pasado 5 de agosto, España celebraba el oro en los Juegos Olímpicos de Tokyo de Alberto Ginés. El deportista nacional fue el mejor en Escalada y se colgó la presea más deseada al cuello. Un empujón para un deporte en auge en muchos puntos de nuestro país.
En Salamanca, el ‘boom’ se ha disparado en los últimos meses. Alrededor de doscientas personas acuden al rocódromo La Ola durante el mes. El deportista más destacado en nuestra provincia es Jesús Muñoz, que posee 9AB en escalada y 8C en bloque. También está su ‘socio’ Daniel García, que ha trabajado para montar rutas por toda la provincia.
“Somos el rocódromo más grande de Salamanca y luego está una especie de garaje que es la antigua asociación. Es una instalación muy grande porque están las presas de resinas, que son muy caras además. En Salamanca no hay delegación de escalada, estamos incluidos en la Federación de Montaña y Escalada de Castilla y León”, explica Víctor Rodríguez, trabajador del rocódromo La Ola.
El propio Víctor Rodríguez es uno de los formadores de los más pequeños. Pero deja claro que la escalada es para todos los públicos: “Lo primero que suelen hacer es preguntar. Las primeras preguntas es si es muy difícil, si es para gente joven, si lo puede hacer todo el mundo… nosotros hacemos bautismo, para que ellos prueben a ver si le gusta. Son grupos muy heterogéneos y también muchos niños. No creo que haya características para escalar; sí creo en la gente que tiene ganas de escalar. El escalador prototipo es una persona delgadita, que pese poco y tenga mucha fuerza. Si hace bloque, muy fuerte y bajito; y si hace deportiva, con cuerda, alto y delgado. Pero hay escaladores de todos los tipos”.