Carlos Molina podría no jugar más en lo que queda de temporada. El guardameta, que ya se perdió el choque contra el Sanse, presenta un esguince de grado 1 en el ligamento lateral interno de su rodilla y un edema óseo. Así, según ha informado el club, por el momento realiza fisioterapia y tareas al margen del grupo y está a la espera de evolución.
Por ello, el partido contra el Depor B pudo ser el último de Molina con la elástica de Unionistas, ya que el jugador se encuentra a la espera de renovar y su gran temporada ha llamado la atención de grandes equipos de la categoría.
De igual manera, el club ha informado que Pau Cendrós ha comenzado la última fase de la readaptación e irá introduciéndose en tareas grupales, sin oposición, eso sí, a lo largo de esta semana.