El Ciudad Rodrigo es uno de esos clubes con solera en el fútbol provincial. Con el primer equipo disputando la Tercera División, la base está viviendo un gran año. El alevín A, por ejemplo, marcha sexto en Primera Provincial a pesar de los problemas que han tenido desde el comienzo. Bueno, problemas u oportunidades. Todo depende del punto de mira.

Es obvio que este conjunto ha optado por la segunda opción. Con doce jugadores en su plantilla, una de las futbolistas, Carmen, está disputando los encuentros ahora con el infantil ya que el campo de fútbol 7 se le quedaba pequeño. A esto se le ha sumado la lesión de Álvaro Castaño o de Claudia, otra joven que también forma parte de la plantilla, y alguna expulsión que ha tenido lugar en el encuentro que disputaron ante el Sporting de Carbajosa. En total, esto ha provocado que en muchos encuentros, como en el último ante el Navega, hayan tenido que acudir solo ocho jugadores y, eso sí, plantar cara a todo aquel que estuviera enfrente.

De hecho, la brega de los pequeños futbolistas solo pudo sucumbir en el último minuto ante un conjunto que aspira a ser segundo. Un resultado que dice mucho de lo que es el equipo. Y esto sin Carmen, que antes de irse anotó 14 goles. Tras su marcha, el conjunto ha sabido rehacerse y con un juego alegre como demuestran las estadísticas, está divirtiendo no solo a los jugadores sino también a la afición que va a verles.

Ayuda para ello el nuevo Toñete, con hierba artificial, ?una maravilla? para el entrenador del conjunto. Después del primero de la temporada que disputaron en tierra ante Unionistas, todos los demás de casa han sido en hierba, a la que también se han adaptado en seguida y que les viene mejor para el estilo de juego que realizan, al primer toque y buenas jugadas.

Forma parte esto de un aprendizaje que va mucho más allá del fútbol. Son cinco años ya juntos y se le sigue inculcando desde el comienzo los valores del deporte, la deportividad, el ser un equipo y respetar a compañeros, rivales y, por supuesto, al árbitro, aunque muchas veces tengan que equivocarse para aprenderlo mejor. Esa es la vida, vivir y aprender, jugar y extrapolarlo fuera del rectángulo. Si quieres algo, tendrás que esforzarte por ello. Cuanto más lo hagas, más probabilidades habrá de conseguirlo. De hecho, cuando se lucha, las victorias gustan más.

Y en eso están en Ciudad Rodrigo, en una lucha constante por sacar equipos. No deja de ser un municipio alejado de Salamanca que no cuenta con demasiados niños y muchos, además, eligen el fútbol sala o los juegos escolares debido a la economía. La cuota no es muy alta pero viajar cada quince días a Salamanca la encarece.

Aseguran, eso sí, minutos y diversión sobre el terreno de juego. Se rota continuamente aunque esta temporada no se esté pudiendo debido a las bajas en cada partido. Esto resta competitividad al conjunto, claro está, pero los niños y niñas están encantados y encantadas. Ellos lo que quieren es jugar y este año están jugando mucho. El año que viene en el fútbol 11 tocará otra nueva competición, primero en la búsqueda de futbolistas para que nadie se quede sin jugar y después, con una nueva etapa en la vida de los jóvenes.

La plantilla está formada por Marco Chicota y Adrián Sustatxa (porteros); Carmen, Mateo y Claudia (defensas); Luis Criado, Carlos Conde, Julio Jerez y Álvaro Castaño (centrocampistas); David Torres, Álvaro Iglesias e Íker Sánchez (delanteros); Gil Rivas y Juan Carlos Conde (entrenadores).

Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios

Lo más leído