El Club de Tenis de Alba de Tormes lleva años peleando por el ascenso a Segunda División con el equipo absoluto masculino y logró el premio de la división de plata con el absoluto femenino. “Nos quedamos a las puertas de ascender de categoría con el equipo masculino. Con los chicos esperamos ascender a Segunda este año. Es algo que persigue el club desde hace años. Con las chicas sí hemos subido a Segunda y el objetivo es intentar mantenernos en la categoría. Nosotros somos el único equipo femenino de Castilla y León que compite”, explica Alberto Rodríguez.
El presidente del club es un formador puro y duro: “Somos un club de base. Tenemos clases desde niños de cinco años hasta veteranos. Buscamos promoción de tenis como de pádel. Nosotros ahora mismo tenemos una escuela de noventa alumnos, que la llamamos escuela de invierno, y luego setenta socios en el club. A mí me gusta competir pero soy formador de vocación. Estamos ahora mismo cuatro personas más dando clases aquí”.
El propio Alberto Rodríguez desgrana cuáles son los pasos que dan desde el inicio con los jóvenes. “Al principio fomentamos que se fidelicen en el deporte a través de las raquetas y, sobre todo, que aprendan a coordinarse. Pero si lo combinan con otros deportes, muy contentos. Después, que vayan aprendiendo los golpes básicos para que sean capaces de empezar a jugar”, continúa.
Y el presidente del club desvela el secreto del CT Alba de Tormes en SALAMANCA24HORAS: “Nosotros intentamos dar un trato muy familiar y muy cercano a todos los jugadores. Intentamos hacer una familia. Cuando vamos a los torneos, intentamos hacerlo de forma más colectiva posible. Viajar juntos, estar juntos… que no sea solo una competición individual”.
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