En el encuentro ante el Real Unión, Pablo Zegarra y hasta el delegado Michel Criado fueron expulsados. Según recoge el acta, el primero por “levantarse del banquillo extendiendo y agitando los brazos de forma airada, protestando una decisión mía”, mientras que al delegado unionista por “su pasividad después de la expulsión del entrenador de su equipo, no haciendo nada para que éste abandonase las inmediaciones del área técnica a la vez que me decía: "No lo quito de aquí, hasta que me digas por qué lo has expulsado"”.
Además, el gallego despachó a gusto tarjetas hacia los blanquinegros, a los que les mostró un total de seis amonestaciones.