El Guijuelo se desquitó de sus últimos dos resultados con un gran triunfo en casa del Atlético B. Los chacineros se impusieron por 0-1 gracias a un tanto de Espina. Felipe Ramos salvó a los suyos del empate en varias ocasiones en la segunda mitad.
Los chacineros saltaron de inicio con Felipe Ramos en la meta; Raúl, Razvan, Iván Pérez y Jesús Muñoz en la zaga; Carlos Rubén, Cristóbal, Luque y Carmona en la medular; y Fuster y Espina como hombres más adelantados.
La primera ocasión del partido llegó a los cuatro minutos, cuando Espina estuvo a punto de mandar a la red un saque de esquina pero fue agarrado por un defensor local. El colegiado no consideró acción punible.
A los veinte minutos, Raúl Ruiz lanzó una falta directa que se marchó ligeramente alta. Y, un cuarto de hora después, volvió a probarlo en una jugada ensayada de saque de esquina. Sin fortuna.
La mejor ocasión colchonera llegó a la media hora aunque Felipe Ramos no tuvo que intervenir porque el balón se marchó alto.
Siete minutos tras la reanudación tardó en adelantarse el Guijuelo. Pablo Espina, que ha sido un acierto su fichaje en invierno, superaba al meta local y ponía el 0-1. La jugada nació de un robo de Carlos Rubén, que habilitó a Fuster y este le cedió la pelota a Espina para el gol.
Tras el tanto chacinero, el filial rojiblanco reaccionó y tuvo tres clarísimas ocasiones de gol. Pero Felipe Ramos se mostró inconmensurable en dos intervenciones que evitaron el empate.
Ángel Sánchez entendió que tenía que reforzar el centro del campo y metió a Juanra por Cristóbal. El Atlético B mandó un balón al travesaño y volvió a avisar a los chacineros.
En el tramo final, Acosta y Jonathan entraron por el lesionado Razvan y por Fuster. Aguantaba el Guijuelo pero Felipe, otra vez Felipe, salvó el empate local con una parada espectacular en la última jugada del duelo.