No se pudo completar la fiesta en Riazor. Unionistas venció por 0-1 con gol de Rayco pero se quedó a un solo paso del playoff. En un día de auténtica fiesta por las calles de A Coruña y en pleno Riazor, el destino fue cruel con los salmantinos que no jugarán por estar en Segunda a pesar de la victoria ni tampoco estarán en la próxima Copa del Rey.
En un escenario inmejorable, Unionistas jugó con mucho más que un once inicial. Centenares de seguidores del equipo salmantino alentaban sin parar al equipo de Ayllón en busca de playoff. Salva bajo palos; Manu, Salinas, Piña y Ramiro en la retaguardia; Acosta, Mandi, Montes e Íñigo en la medular; y Espina y De Miguel en punta.
El Deportivo sorprendió con línea de tres centrales, Aguirre y Doncel en los costados y tres jugadores en ataque: Álvaro Rey, Noel y Soriano.
Lo cierto es que el duelo comenzó timorato, con Unionistas midiendo sus fuerzas en un escenario de otra categoría y el Deportivo cómodo. A los quince minutos, llegó la primera ocasión de la primera mitad. Salinas va al suelo, gana la disputa y dentro del área, Montes cede a Íñigo para el chut. El disparo del vasco se topa con un rival y De Miguel lanza desviado.
Después del minuto 23, en el que el himno de la extinta UDS fue coreado por los aficionados charros, los seguidores del Deportivo respondieron con aplausos. Un minuto después, gritos de “el Dépor es de Primera”. Más aplausos.
En medio de la fiesta en las gradas, apareció Salva. Mal en las salidas; bien bajo palos en la primera mitad. Soriano se coló en la defensa charra pero su remate de cabeza impactó en el meta unionista cuando se cumplía la media hora de duelo.
Cerca del descanso, una doble mala salida de Salva pudo costar caro a Unionistas. Sin embargo, lejos de venirse abajo, el equipo salmantino se sacudió el miedo con un zapatazo de Espina al poste y, en el rechace, Brea le negó el gol a De Miguel.
El segundo tiempo comenzó con el cambio de Mier por Manu Sánchez para revitalizar el carril del ‘2’. Los charros se metían en campo rival con asiduidad y entre Íñigo y Salinas desnivelaban el campo por la izquierda. Solo llegaba el susto de Soriano, con un disparo al palo.
Ayllón tocó de nuevo la tecla de las sustituciones. Y encontró premio. Rayco, que acababa de entrar junto a Nespral, se quedó solo tras un pase de Espina y batió con comodidad a Pablo Brea en el mano a mano.
Tocaba mirar otros campos. Lo tuvo cerca Unionistas, pero nunca llegó a estar en zona de playoff. El destino vuelve a ser cruel con los charros, que se quedan de nuevo a un solo paso del playoff de ascenso a Segunda División por segundo año consecutivo.
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