Querido. Odiado. Aplaudido. Pitado. Así ha sido la etapa de Martín Galván en el Salamanca CF UDS. Tres temporadas con luces y sombras pero con una aura por encima de cualquier cosa: su incidencia en los derbis.
El primer encuentro entre Salamanca CF UDS y Unionistas lo decidió con un excelente lanzamiento de falta ante el que nada pudo hacer Molina. Pero mucho más importante fue su actuación en la vuelta en Las Pistas.
Fue el 22 de abril de 2018. Unionistas estaba cerca de certificar su primer puesto pero el Salamanca CF UDS llegaba tremendamente necesitado si quería meterse en los playoff.
En la previa del partido, el equipo dirigido por Pablo Cortés salió por la puerta de vestuarios del Helmántico y cruzó entre la afición de Unionistas que hacia cola para entrar a Las Pistas.
El cántico más entonado por la afición local fue "Unión solo hubo una". Galván, ajeno a esta polémica, bajó las escaleras hacia el vestuario de Las Pistas entonando la misma canción mediante silbidos. Es su forma de ser.
Una vez saltó al campo, cuando el partido agonizaba, soltó un tremendo zapatazo para poner el 1-2 y anotar uno de los goles de la corta historia de su club. Sin ese tanto, el Salamanca CF UDS no hubiese podido jugar el playoff de ascenso.