No se había estrenado De Miguel lejos del Reina Sofía. Pero el ‘pichichi’ de Unionistas rugió en el Reino de León para dar la victoria a Unionistas ante la Cultural (0-1). Los charros, que jugaron durante una hora con uno más, se colocan terceros.
No reservó nada Mori de inicio. Salva bajo palos; Manu, Salinas, Ramiro y Piña en la zaga; Acosta, Nespral, Íñigo y Rayco en la medular; y Espina y De Miguel en punta.
El arranque charro fue impoluto. Solo le faltó el gol. Íñigo y Salinas percutían una y otra vez por la izquierda. El vasco tuvo dos clarísimas. La primera la mandó fuera; en la segunda se encontró con una parada magnífica de Sotres. Salva solo apareció para salir valiente a los pies de Nahuel a los cinco minutos.
A los veinte minutos, y con un dominio aplastante de Unionistas, Aarón realizó una dura acción sobre Piña y le metió la bota en la cabeza. El colegiado no lo dudó. Roja. Justa.
A partir de ahí, a Unionistas le costó. La Cultural replegó en campo propio y los charros jugaron mucho más lento sin espacio en campo rival. Tan solo un disparo cruzado de Espina metió miedo a Sotres.
Y los locales crecieron. Con espacios en el césped, Nahuel, Buenacasa y Solís trataron de correr. La opción más clara de la Cultural llegó en un disparo de Castañeda que tocó en Acosta y se fue alto por poco.
El descanso dejaba varias noticias. La primera es que Unionistas necesitaba movilidad en campo rival, juego entre líneas y vigilancias para evitar sustos en la pérdida del balón.
El movimiento en el intermedio de Dani Mori fue Mandi por Acosta en la medular. Y, a los diez minutos de la reanudación, Pitu por Espina. Los charros necesitaban movilidad en campo rival y el ‘11’ tendría que ser el encargado de buscar las espaldas de los centrocampistas leoneses.
El gol de Unionistas llegó a los veinte minutos de la segunda parte. Los blanquinegros sacan rápido un córner, Íñigo centra desde el lateral del área y De Miguel se eleva para mandar un cabezazo picado a la red. Los más de trescientos charros en las gradas gritaron al unísono. Un rugido en pleno Reino de León.
Parecía controlado el tramo final de partido. Sin embargo, Mandi vio la doble amarilla en el minuto 85. Mori metió en el césped a Pedraza y Cortina y acabó con Pitu como ‘9’ y una medular formada por sus dos últimos cambios, Nespral y Mier. Tocaba defender. Y se hizo. Y también apareció Salva en el último suspiro con una mano magistral. Tres puntos muy importantes. Unionistas ruge desde la tercera plaza.
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