Nada es imposible en el Pabellón de Würzburg. Perfumerías Avenida no solo volteó los doce puntos de desventaja de la ida ante Girona, sino que ganó de forma muy clara la eliminatoria para meterse en la gran final de la Liga Femenina (82-51). Las charras, con un partido espectacular, pelearán por el título de Liga con el factor cancha de su lado.
La tarea de remontar doce puntos al Girona de Íñiguez se antojaba complicada pero nadie se quiso perder el partido. Ni las lesionadas Silvia Domínguez y Fasoula ni tampoco Maite Cazorla, ex de Perfumerías Avenida y ahora en las filas de Praga. Ni muchísimo menos La Marea Azul.
El quinteto charro estuvo formado por Carter, Leo, Delaere, Gil y Koné. El choque comenzó a ritmo lento. Hasta que la canaria Leo Rodríguez le puso mojo picón y aceleró para asistir a Koné. Contestó Canella con un dos más uno (10-10). A partir de ahí, hasta el final del primer acto, parcial de 10-0 de las charras con triples de Olcay y Carter y una canasta de la americana sobre la bocina. 20-10. Y gritos atronadores de “sí se puede” en el pabellón.
Dos tiros libres de Sika Koné empataban la eliminatoria. Restaban 8:39 para llegar al descanso. Y Girona respondía con un 0-6 de parcial. Sin embargo, las charras fueron con todo al ataque y Leo y Gil anotaron sendos dos más uno. Y, a 3:26 para el descanso, la canaria puso en pie al pabellón con un triple para hacer el 33-18.
Perfumerías Avenida estaba desatado con Gil, Leo y Carter en modo avasallador. La murciana encestó un triple, al que respondió Mendy; Carter cogió el balón y contestó de nuevo desde la línea de tres. Leo, con un baile en la pintura, puso el 43-25 con el que se cerró el segundo cuarto.
El tercer cuarto fue para corazones fuertes. Perfumerías Avenida se movió en la renta de veinte y dieciséis puntos. Girona daba réplica porque no quería irse del partido. Gil batallaba brava en la pintura, al igual que Sika. Fuera, Leo ponía una vez más la magia. El marcador, con diez minutos por jugarse, era de 61-43.
Nunca una tensión se disfrutó tanto en Würzburg. Las de Nacho Martínez cuajaron diez minutos increíbles para meterse en la final. Las charras fueron llevadas en volandas por la increíble Marea Azul y el alcalde Carlos García Carbayo aplaudía en el palco la machada de las suyas. Leo, que está haciendo unos playoff de auténtico escándalo, era aclamada. Perfumerías Avenida llegaba a los treinta puntos de ventaja mientras que Girona se desvanecía en la pista. El pase a la final ya era charro. Y Würzburg, el teatro de los sueños del baloncesto femenino, ya espera con ansia una nueva final.
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