Cuando los servicios jurídicos del presidente de Globalia comenzaron a dar los pasos hacia la transformación en SAD con el principal objetivo de ahorrarse costes y procesos en un supuesto ascenso a Segunda, hubo algunos clubes que se ofrecieron a aceptar la cesión de los derechos federativos de la UDS con el objetivo de que el equipo saliera a competir lo antes posible.
En esas semanas del mes de agosto, el Hergar o el poseedor de los derechos del antiguo Ribert se ofrecieron a ser la llave que agilizase los trámites para que el nuevo Salamanca pudiera iniciar la liga en Segunda B, pero el haber iniciado los trámites para ser SAD hicieron que esa opción quedar en agua de borrajas.
Ahora, encima de la mesa vuelve a estar esa opción, que siempre debiera contar con el beneplácito de la juez, una posibilidad que tiene el respaldo del CD CF Salmantino, que ya lleva más de un mes compitiendo.
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