Casi 50 años, se dice pronto, acompañan a las espaldas del Colegio Maestro Ávila de Salamanca en lo que a docencia se refiere. Y el hecho de llegar a esta cifra, con casi 900 alumnos, es una muestra clara de que el trabajo que se realiza se efectúa de una manera dedicada, cercana y en sintonía con las familias. Pero siempre colocando en el centro de su acción a un estudiantado, al que nunca se considera como un número más, y que, a lo largo de los años, se ha convertido en el mejor estandarte que puede lucir el centro.
El Colegio, situado en el entorno de las Peñuelas de San Blas y a escasos minutos de la zona monumental, es un centro privado-concertado que oferta todos los niveles, desde educación infantil hasta bachillerato y ciclo formativo. Cuenta, además, con amplias instalaciones que aúnan, en un estilo único, la antigüedad de un vetusto monumento, como el que se encuentra, con la novedad y la innovación que la educación del S. XXI requiere. Un gran patio central, que acoge múltiples canchas de baloncesto, se une a dos patios traseros que permiten la práctica de deportes como el fútbol o el voleibol, sin olvidar zonas de juegos para que, los más pequeños de la casa, se desarrollen en un entorno armonizado, lúdico y estructurado. A ello habría que añadir un amplio gimnasio –habilitado para la práctica de múltiples deportes-, la capilla, salas de psicomotricidad, laboratorios de plástica, informática, tecnología y ciencias, y las aulas que, cada día, acogen y acunan los sueños y aspiraciones de las futuras generaciones. O incluso un aula de Paz, pionera en los centros de la Comunidad, que, iniciada por un equipo de profesores del centro, ha edificado y pivotado uno de los referentes del colegio: la educación emocional.
Igualmente, sabedores de la importancia del futuro, el centro ha ido adaptando sus metodologías a las necesidades de una sociedad cada vez más enchufada, sin dejar a nadie atrás, hasta desembocar en un enriquecedor proyecto de digitalización que prepara al discente para el mundo en el que tendrá que vivir. Así, el proyecto iPad que ha comenzado a andar recientemente, procura llevar la clase a la actualidad, permitiendo a los jóvenes aprovechar la apertura que el mundo cibernético supone para, al mismo tiempo, interiorizar su uso y adquirir hábitos y costumbres saludables al respecto del manejo de estos dispositivos. Nos adaptamos al futuro sin renunciar a lo que somos.
Y no se trabaja por interiorizarlos sólo en el ámbito tecnológico. Al contrario, desde el Colegio Maestro Ávila se pone especial acento en la adquisición de hábitos saludables y, desde ellos, en la construcción de una sociedad mejor en todos los niveles educativos. Por ello, y tomando en consideración la identidad católica que siempre le ha acompañado, se enfoca el mismo desde los valores del Evangelio. Esto ha motivado que, al igual que los otros centros que conforman la Fundación Educere, se haya unido al Pacto Educativo Global propuesto por Su Santidad, el Papa Francisco, que comparte ese anhelo que ha acompañado al colegio desde su fundación: una sociedad más justa, fraterna e inclusiva.
Esa búsqueda es, sin lugar a duda, una de las características principales de este centro. Desde hace décadas, el Maestro Ávila ha destacado por ser un referente en el ámbito educativo en la ciudad de Salamanca. En los últimos tiempos, buscando ampliar su oferta e implicación en la educación inclusiva, se ha iniciado un proyecto de pictografía para facilitar el día a día del alumnado neurodivergente.
A mayores, el Colegio, consciente de la importancia idiomática en un mundo globalizado, ha establecido una importante red de intercambios con diversos países de diversas lenguas extranjeras, como Francia, Alemania o Inglaterra, que permiten que el alumno no sólo conozca el idioma, si no que se empape de la cultura e idiosincrasia de esos países.
Igualmente, el centro apuesta por el diálogo y los métodos alternativos de resolución de conflictos, lo que ha motivado la implantación de un sistema de mediación entre alumnos que ayuda a resolver la amplia mayoría de conflictos que surgen entre alumnos, algo inevitable en un centro educativo.
En definitiva, el Colegio Maestro Ávila es una apuesta segura en el ámbito de la educación integral de calidad, un referente en el ámbito de la inclusión y el mejor lugar en el que educar, desde los valores del Evangelio, a las generaciones futuras para una sociedad justa y fraterna.
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