ENTREVISTA | Mario Vaquerizo: "Las Nancys Rubias reivindicamos el papel de servicio público que hacen las orquestas de pueblo"

El grupo aterriza este viernes en la Plaza Mayor de Salamanca y promete "un concierto muy agradable y para todos los públicos"

Nancys Rubias
Nancys Rubias

A un año de cumplir la veintena sobre los escenarios, las Nancys Rubias aterrizan en la Plaza Mayor de Salamanca para protagonizar el concierto de este viernes, 8 de septiembre, junto a Fangoria. Y lo hacen con un repertorio repleto de versiones para que el público charro conozca todos los temas que interpreten y puedan sentirse como en una verbena de pueblo, fiesta que reivindican en su último álbum, 'Orquesta Nancy'. Mario Vaquerizo nos ha hablado, entre otras cuestiones, de este proyecto y del próximo aniversario del grupo, al que define como "muy atípico, muy marciano". 

¿Cómo afrontáis las Nancys Rubias vuestro primer concierto en un monumento de la envergadura de la Plaza Mayor de Salamanca?

Lo vivimos con mucha ilusión y con sensación de reconocimiento, porque creo que en las fiestas de Salamanca siempre han elegido a lo mejorcito de la música. Sí es cierto que es la primera vez que voy a actuar con Nancys Rubias en la Plaza Mayor, pero no es la primera vez que acudo como espectador o como representante a otros conciertos, como el de Fangoria en 2016. Entonces, es motivo de alegría. Creo que las fiestas populares que tenemos en España hay que reivindicarlas porque son muy bonitas y, sobre todo, muy necesarias. Aquí venimos a entretener al público, a pasarlo bien. Además, nosotros siempre afrontamos los conciertos como una especie de salida de acampada con los amigos. Nos cogemos la Nancy furgo, nos montamos los amigos... En esta ocasión, van a venir dos amiguitos más de Los Ángeles para acompañarnos y ¡qué vivan las fiestas populares!

¿Qué se van a encontrar los salmantinos que acudan el 8 de septiembre al ágora salmantina?

Hemos decidido reconvertirnos en Orquesta Nancy, por lo que el concierto va a ser muy agradable y para todos los públicos, no solamente para los fans fans, sino que todo el mundo que quiera estar allí pasará un rato agradable. El repertorio de esta última gira se basa en versiones de éxitos de artistas que hemos admirado y que nos gustan. Hay canciones desde Paulina Rubio a Kasabian, pasando por Raffaella Carrà, Alaska y Dinarama... Nosotros reivindicamos ese papel de servicio público que hacen las orquestas de pueblo, que también es un género en sí mismo, y muchas veces no se valora la importancia que tienen. Y las Nancys tenemos este espíritu de entretener y divertir encima del escenario.

Como ya has dicho, en vuestro último álbum, ‘Orquesta Nancy’, encontramos versiones de artistas tan dispares como Luis Miguel o Blondie. ¿Cómo ha sido el proceso de selección de las canciones?

El proceso de selección ha sido casualidad. Ten en cuenta que las Nancys somos un grupo muy atípico, muy marciano. Es decir, no formamos parte de la industria musical, puesto que no sonamos en las radios comerciales, pero a la vez sí formamos parte de la industria porque no paramos de actuar en fiestas como las de Salamanca. Asimismo, nosotros no estamos sometidos al imperativo de tener que sacar disco cada determinados años, etcétera. Nosotros lo hacemos cuando queremos.

En estos últimos cinco años que hemos estado sin sacar disco no hemos parado de actuar, y como queríamos seguir ofreciendo cosas nuevas y no nos apetecía cantar canciones nuevas, pues fuimos haciendo un repertorio de versiones para no cantar siempre lo mismo. ¿Qué ha pasado? Que nos hemos juntado con 12 canciones y dijimos 'pues mira, esta es la manera de sacar un disco nuevo de las Nancys', un disco de versiones que también reflejan mucho lo que es la filosofía de Nancys, que es un grupo muy ecléctico. No somos dogmáticos y jamás tenemos ningún tipo de reparo ni prejuicio al reconocer que nos gustan tanto los Village People como los Ramones. No tiene por qué gustarte solamente el rock o la disco music, a nosotros nos gusta todo ese tipo de estilos porque participamos de ellos y, sobre todo, lo que nos gusta son las grandes estrellas, ¿no? Entonces, pues damos rienda suelta a todo nuestro background. Precisamente, si algo nos caracteriza a las Nancys, es eso de no ser dogmáticas ni fundamentalistas. Disfrutamos con las buenas canciones y los artistas, sean del estilo que sean.

Nancys Rubias
Nancys Rubias

¿Qué tienen las verbenas que no ofrezcan los conciertos convencionales?

Pues que te descubren gente. Es decir, una verbena es para todos los públicos, son conciertos gratuitos, no solamente va el fan o el que tiene interés en conocerte, sino que tú estás allí pasándotelo bien con tu grupo de amigos, tomándote una cerveza, disfrutando de las fiestas, que ya digo que son muy necesarias, y tú vas allí y a lo mejor descubres a un grupo que a priori no te interesaba y después compruebas que tampoco está tan mal, ¿no? En cambio, los conciertos convencionales es predicar para el convencido.

En el fondo, siempre hemos dicho que las Nancys somos entretenedoras rockeras. Venimos aquí a entretener y a pasarlo bien, como me pasa a mí como espectador cuando voy a ver a The Kiss o a la Pantoja. Pasar un buen momento, sin tratar de aleccionar a nadie ni decir lo que tienen que hacer. Y nuestras músicas son canciones muy estándar, muy comerciales, a las que aportamos nuestra personalidad, el punto Nancy, y hacen que te diviertas. Es algo que llevamos observando en los últimos años. Son conciertos muy agradecidos, porque todas las canciones las conoce todo el mundo, entonces eso hace que salgas muy power. Por eso mismo también no nos paran de llamar. 

"Como somos tan raras, a día de hoy no sabemos si vamos a seguir actuando el año que viene o no"

En abril de 2024 las Nancys Rubias cumplís veinte años sobre los escenarios, ¿tenéis pensada alguna celebración especial?

Pues mira, te digo. Como somos tan raras, a día de hoy no sabemos si vamos a seguir actuando el año que viene o no. Ten en cuenta que, aunque suene muy muy raro visto desde fuera, nosotros jamás contemplamos tener a Nancys Rubias como un medio de vida o como una profesión. Paradójicamente, se ha convertido en un medio de vida, porque nos pagan por ello y nos pagan muy bien, pero no hemos dejado nuestras otras profesiones. Yo sigo siendo manager y showman, mi hermana es directora de arte y diseñadora de joyas, el otro, con su taller de costura, produce para grandes marcas a nivel nacional e internacional... Es decir, nos gustan mucho nuestros trabajos estándar y este se ha convertido en un trabajo, pero sin ninguna pretensión, por lo que hacemos lo que nos pide el cuerpo en cada momento. Eso sí, cuando nos lo piden, lo hacemos de la manera más profesional, porque es cierto que con los años te ha sido profesionalizando, ¿no?, aunque también daba lo mejor de mí cuando yo pagaba por dar conciertos.

Por otro lado, la relación personal también es mejor, pues ya nos conocemos todos mejor y somos un grupo de cuatro mejores amigos que los fines de semana en vez de estar en la playa o en las discotecas, nos vamos con nuestra Nancy furgo a pasarnoslo bien y encima nos pagan un dineral, por lo que es perfecto, y no estamos sometidos a esas leyes de la discográficas y de todo el entramado de la industria musical al no formar parte de ellas porque no nos toman en serio, pero a la vez sí formamos parte de ese entramado porque sino no estaría hablando contigo ni subiriamos a un escenario tan importante como es la Plaza Mayor de Salamanca. 

¿Qué es lo que más destacarías de vuestra trayectoria en estos veinte años?

La amistad. El darte cuenta de que tienes a unas personas que son esenciales en tu vida y que Nancys Rubias no solamente se ha consolidado en un proyecto musical, sino que también es el éxito de la verdadera amistad. Es como la canción que nos compuso Nacho Canut, la que dice 'somos amigas para siempre', y yo creo que a día de hoy eso es el mayor triunfo de las Nancys. Y, sobre todo, no haber tenido pretensiones de llegar a ser número uno, porque la pretensión te genera frustración. La única pretensión que teníamos era divertirnos y el no esperar nada. Cuando te viene dado todo, pues lo disfrutas mucho más. No pretendíamos, por ejemplo, telonear a los Pet Shop Boys y lo hicimos. Este tipo de cosas hace que lo vivas con una sensación de alegría y de felicidad. Esos artistas que tienen como esa visión victimista de lo que es la industria musical y demás... me dan un poquito de pereza. Yo monté el grupo para pasarlo bien y canalizar mi momento de ocio en un proyecto musical con los amigos que me gustaban. Si al día de mañana falta algún amigo nuestro dentro de las Nancys pues yo creo que no continuaríamos.

"Siempre he dicho que estamos en una dictadura de lo políticamente correcto"

Hablabas antes de la industria musical y es obvio que ha cambiado enormemente desde que comenzasteis. ¿Ha sido para mejor o para peor?

Ese cambio es diferente. Es cierto que ha habido un avance y que nosotros estamos en esa generación bisagra que hemos visto el pasado, estamos viendo el presente y contemplando el futuro, ¿no? Entonces, no es ni mejor ni peor. Yo creo que ha cambiado la forma de editar o presentar un disco, de hacer la promoción... Ha cambiado todo. Yo hecho de menos algunas cosas del pasado, porque creo que estaban muy bien, pero también me amoldo al presente, aunque hay algunas cosas que no me gustan, ¿sabes lo que te quiero decir? Entonces, es adaptarte. Yo creo que no hay que verlo como un drama. Simplemente ha cambiado la forma de consumir música en cuanto lanzas un disco. Claro, el problema no lo tiene el artista, porque podemos seguir dando conciertos, pero las discográficas se han visto obligadas a reinventarse porque ya no pueden vivir solo de la venta de discos. El formato físico está desapareciendo. Todos los artistas jóvenes usan las plataformas digitales y ya está. Mentras te puedas permitir hacer lo que quieras en cada momento... eso es lo que lo que impera y en tu mano está hacerlo así. 

Hace poco habéis sido objeto de controversia por llevar una camiseta con simbología franquista. ¿Crees que se nos está yendo de las manos lo políticamente correcto?

No voy a entrar al trapo ni a dar pábulo a gente que solo se basa en el anonimato y convierte una opinión en noticia. Si me ven como controversia, paso total, pero siempre he dicho que estamos en una dictadura de lo políticamente correcto. Yo hago lo que quiero y cómo quiero, y al que le guste bien y al que que no, no, y que me dejen en paz.

¿Y qué opinas de la cultura de la cancelación? ¿Es justo que se pida cancelar a un grupo por una acción o comentario controvertido?

No creo en la cultura de la cancelación. Ya de por sí, la palabra cancelar me parece muy fea. Te duele hasta cuando tienes que cancelar un concierto por motivos atmosféricos... Pero vamos, que al final a mí nadie me ha cancelado, porque creo que el sentido común impera en el resto del mundo. No he sentido nunca ninguna cancelación. Ni en mi trabajo ni en mis conciertos. 

"Ana Rosa Quintana es la mejor jefa que he tenido en mi vida"

¿Tienes algún proyecto que se pueda conocer?

El próximo 18 de septiembre vuelvo a ser chico de Ana Rosa Quintana. Ya lo fui hace 10 años y ahora voy a colaborar una vez por semana en su nuevo programa. ¿Y qué quieres que te diga? Es otro regalo más que me da la vida. Estar al lado de esa gran señora, como es Ana, es motivo de alegría y de aprendizaje. Es la mejor jefa que he tenido en mi vida y trabajar con ella es una delicia.

Aparte de eso, tengo muchos más proyectos, pero ya sabes cómo son estas cosas de las televisiones, que no te dejan anunciar nada hasta que no lo hagan ellos. Tengo nuevo programa de televisión a la vista que he estado grabando, muchas colaboraciones... He conseguido que mis aficiones se conviertan en mi medio de vida y eso hace que trabajes mucho, pero que no lo vivas como un trabajo. Hay que tener también cuidado con eso, porque muchas veces, cuando eres una working girl como digo yo, al final te olvidas de tu vida personal y también hay que cuidarla. Lo que ocurre es que mi trabajo está muy ligado a mi vida personal, entre otras cosas porque trabajo con mi mujer y disfrutamos al máximo trabajando juntos. También trabajo con mis amigos. Lo que quiero decir es que me siento un ser muy muy afortunado y, sobre todo, porque me siguen llamando, obviamente.

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