La "buena" gestión económica del Gobierno municipal ha permitido liquidar el Presupuesto del Ayuntamiento de 2021 con un superávit de 11.103.309. El saneamiento de las cuentas ha permitido seguir apostando por el gasto social, mantener la calidad de los servicios públicos, ejecutar nuevas inversiones y fomentar la actividad económica y el empleo sin la necesidad de subir los impuestos en medio de las dificultades sobrevenidas por la crisis de la pandemia del coronavirus.
De esta manera, el gasto social por habitante en 2021 alcanzó los 645,78 euros, casi el 48% más de lo que se recauda en concepto de impuestos por habitante (437,84 euros).
Por otro lado, el capital vivo de la deuda municipal se situó a 31 de diciembre de 2021 en 74.145.593 euros y una ratio de deuda sobre ingresos corrientes del 47,24% como consecuencia del aumento extraordinario de recursos para financiar inversiones municipales y de la necesidad de financiar las mismas recurriendo al endeudamiento, al tener que destinar los recursos propios a atender las medidas extraordinarias de apoyo a las personas, familias, autónomos y empresas puestas en marcha para afrontar los efectos sociales y económicos de la crisis sanitaria. Aún así, gracias al superávit obtenido al liquidar el ejercicio de 2020, tanto el capital vivo de deuda como la ratio de endeudamiento se situaron por debajo de las previsiones iniciales al aprobar el Presupuesto de 2021, que situaban el primero en más de 86 millones de euros y la segunda en casi el 57%.
Por último, la intención del Ayuntamiento es destinar el superávit obtenido en liquidación del ejercicio de 2021 a reducir el capital vivo de la deuda municipal y atender los mayores gastos que puedan sobrevenir por el incremento de los costes de los suministros energéticos y de combustibles, por la necesidad de atender nuevas necesidades sociales (como puede ser el incremento de ayudas para las familias y personas en situación de vulnerabilidad).
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