Con la llegada de la primavera aumentan las reacciones alérgicas relacionadas con pólenes, por lo que los expertos advierten de extremar las precauciones al volante en estas circunstancias.
Entre las recomendaciones aconsejan limpiar todos los filtros del vehículo y sustituirlos cada 15.000 kilómetros o una vez al año, si se detecta un olor extraño al encender y apagar el sistema de climatización.
Esto evitará posibles distracciones ya que en un tramo a 90 kilómetros por hora el turismo puede recorrer hasta un centenar de metros debido a los estornudos.
Igualmente, se debe prestar atención a las alteraciones del sueño que produce la rinitis alérgica, que provoca somnolencia diurna, así como los antihistamínicos. Los más seguros son los que emplean como principio activo bilastina, ebastina, desloratadina, loratadina y terfenadina.
Por su parte, la Dirección General de Tráfico (DGT), advierte sobre no automedicarse si se va a coger el coche, no mezclarlos con alcohol y mantener los filtros limpios y adecuados.
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