La Audiencia Provincial acoge este lunes el juicio por el accidente mortal de Galisancho, en el que el conductor se enfrenta a hasta 8 años de prisión

El Ministerio Fiscal también solicita la retirada del permiso de conducir un total de 11 años, además de una indemnización económica a los familiares de las víctimas y al único superviviente de casi 600.000 euros

Así quedó el vehículo tras el accidente de Galisancho
Así quedó el vehículo tras el accidente de Galisancho

La Audiencia Provincial de Salamanca acoge desde este lunes el juicio por el accidente mortal de Galisancho ocurrido en julio de 2019 en el que perdieron la vida cuatro jóvenes de entre 17 y 20 años. El Ministerio Fiscal pide para el conductor del vehículo, A.J.L., único acusado, una pena de 8 años de privación de libertad. Además, según el escrito de calificación del Ministerio Fiscal previo al juicio, al que ha tenido acceso SALAMANCA24HORAS, también se solicita la retirada del permiso de conducir por un periodo de 11 años. 

Además de esto, el fiscal solicita para A.J.L., conductor del vehículo, una indemnización económica total a los familiares de las víctimas y al único superviviente del accidente que asciende a más de medio millón de euros, concretamente pide una indemnización total de 569.267 euros. Esta cantidad sería repartida de la siguiente forma: 62.481 euros para cada uno de los padres de una de las víctimas y 22.543 euros para su hermano; para los progenitores de otra de las víctimas mortales, el Ministerio Fiscal solicita una indemnización de 51.455 euros para cada uno de ellos y 18.564 euros para su hermano. En el caso del tercer fallecido, la Fiscalía pide una compensación económica de 51.455 euros para cada padre, además de 14.910 euros para cada uno de los dos hermanos; mientras que para los padres de la cuarta víctima, la indemnización solicitada asciende a 78.013 euros para cada progenitor. En el caso del único superviviente del accidente -el copiloto, A.Z.M.- el fiscal pide indemnizarlo con 11.513 euros (2.493 euros por las lesiones temporales; 4.959 euros por las secuelas y 4.080 euros por los perjuicios estéticos ocasionados por el suceso). 

Ahora, más de dos años después, es turno para que la Sala que acoge la vista, que se celebrará este lunes y martes, determine si el conductor, A.J.L. es culpable de cuatro delitos de homicidio imprudente y uno de lesiones por varios motivos: conducir bajo los efectos del alcohol y drogas -dio positivo tanto en cocaína como en TCH en el análisis y en el contraanálisis-, y por un exceso de velocidad que pudo ser la principal causa del accidente. Asimismo, también se le juzgará por el número de ocupantes del coche, ya que en el turismo siniestrado iban seis personas cuando tenía cinco plazas.

El único acusado compareció semanas después del suceso -el 19 de septiembre de 2019- ante el juez que instruye el caso y declaró "no recordar nada debido al golpe fortísimo que sufrió en la cabeza". Además señaló ante el magistrado que "tampoco recordaba cuántas personas ni quiénes iban en el coche" e indicó que "no había consumido drogas antes del siniestro y que únicamente había bebido una litrona de cerveza de la que le había dado sorbos más gente". Una versión contrapuesta, ya que la entonces delegada del Gobierno en Castilla y León, Mercedes Martín Juárez, confirmó días después que el conductor consumió drogas y alcohol; un hecho que posteriormente volvió a confirmar el contraanálisis realizado en el laboratorio, que indicó que el conductor había consumido alcohol, hachís y cocaína.

Un accidente que conmocionó a todo un pueblo

El domingo 21 de julio de 2019, poco antes de las 07:30 horas de la mañana, el Servicio de Emergencias de Castilla y León recibía una llamada alertando de que un turismo se había salido de la carretera DSA-130 -que une pueblos como Éjeme, Galisancho y Galinduste con la carretera de Alba de Tormes- a la altura de Galisancho, impactando de manera violenta contra un árbol. En el turismo viajaban seis jóvenes (todos de Alba de Tormes), que venían de las fiestas de Santa Inés, un pueblo cercano. Hasta el lugar del siniestro se desplazaron rápidamente una dotación de los Bomberos de la Diputación de Salamanca, la Guardia Civil de tráfico, un helicóptero sanitario, una UVI móvil, tres ambulancias con soporte vital básico y dos equipos médicos de Alba de Tormes para atender a los heridos. 

Sin embargo, al llegar los Servicios de Emergencias desplazados hasta allí, solamente pudieron certificar la muerte de dos varones V.L.E. y R.G.G., de 17 y 20 años, respectivamente, que fallecieron en el momento a consecuencia del accidente; mientras que una joven, R.G.G., de 17 años, perdía la vida camino del hospital. Esa misma tarde, un cuarto joven, R.V.S., de 19 años, fallecía en el Hospital como consecuencia de las graves heridas provocadas. Además el conductor, A.J.L., varón de 29 años, y el copiloto, A.Z.M., de 25 años, resultaron heridos graves, y posteriormente fueron hospitalizados en el Complejo Asistencial de Salamanca, donde permanecieron ingresados varios días hasta que se recuperaron de las graves lesiones.

Al día siguiente del accidente, el Pabellón Municipal de la villa ducal acogía el funeral de los cuatro jóvenes fallecidos, todos vecinos del pueblo. Una situación desoladora en la que nadie llegaba a creerse lo sucedido; todos los allí presentes hablaban de “una generación perdida”, puesto que además se trataba de cuatro jóvenes muy implicados con el pueblo.

Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios

Lo más leído