Una de cada 10 personas es incapaz de identificar las emociones. El diagnóstico para esta incapacidad es el de la alexitimia, una enfermedad que puedes sufrir y no saberlo. Además de no permitirte identificarlas, tampoco te permite expresarlas de forma correcta, siendo una 'dolencia' asociada a la genética y con traumas que nos han marcado en la infancia.
La alexitimia no es muy conocida. Esta palabra, que proviene del término griego con ese mismo nombre y que se traduce como ‘sin palabras para la emoción’, da nombre a una afección que aún se está estudiando y que quienes la sufren pueden tener dificultades a la hora de identificar sus sensaciones corporales y comunicar sus estados emocionales.
Respecto a las causas de esta afección, cabe destacar que muchos expertos han señalado que los traumas de la infancia son los que más influyen en ella. También influye la genética, pero, especialmente, los traumas en la infancia "pueden causar cambios en el cerebro que lleven a dificultar el poder sentir e identificar emociones más adelante en la vida". Además, esta afección, la cual se diagnostica con síntomas como la falta de control de los impulsos, la irritabilidad y la frustración, la confusión y la incomodidad, el aumento del ritmo cardiaco, la falta de afecto, la dificultad a la hora de nombrar las emociones o la dificultad identificando y entendiendo las emociones que otras personas expresan, ha sido relacionada con la depresión.
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